La Defensoría del Pueblo expresó su preocupación por la situación humanitaria en el departamento del Vaupés, debido a las acciones armadas que realiza el Frente Primero ‘Armando Ríos’ y la Compañía ‘Urías Cuellar’, disidentes de las FARC, especialmente en Mitú, Carurú y Taraira y las áreas no municipalizadas de Papunahua, Yavaraté y Pacoa.
El Sistema de Alertas Tempranas de la Defensoría emitió la Nota de Seguimiento 014 del 2 de noviembre de 2016, en la que informa sobre riesgos contra la población civil de desplazamientos forzados, amenazas, extorsiones, reclutamiento y utilización de niños, niñas, adolescentes y jóvenes y la instalación de minas antipersonal que, unido a los retenes ilegales, estarían afectando la libre movilización de comunidades indígenas y las labores diarias de cultivo.
El Sistema también alertó sobre la posible ocurrencia de homicidios selectivos, hostigamientos y ataques armados, el uso de medios y métodos para generar terror en la población como la intensificación de las intimidaciones y el control social para que las comunidades acaten las exigencias de esas disidencias.
La entidad aseguró que en dichas zonas del Vaupés son sumamente pobres, con ausencia de vías y medios de transporte y con una precaria atención en salud y baja permanencia en la escuela de los niños, niñas y adolescentes por las deficiencias en materia de recursos humanos y logísticos, entre otros.
Por esa razón, la Defensoría del Pueblo hizo un llamado urgente al Gobierno Nacional y a las autoridades competentes, para que adopten eficaces medidas de prevención, protección y atención humanitaria de carácter integral, tendientes a evitar las violaciones de los derechos humanos e infracciones al Derecho Internacional Humanitario, como consecuencia del accionar de la disidencia de las FARC en Vaupés.
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