“A mi esposo me lo mataron esos policías”, eran las palabras que entre el dolor y el llanto repetía Aura Huertas, esposa de Guillermo López Urrea, el taxista que murió la mañana de ayer luego de que un vehículo particular, en el cual viajaban tres policías que se encontraban en estado de embriaguez y una mujer, lo estrellara de frente.
Siendo las 4:00 a.m. de ayer, Guillermo López salió de su casa ubicada en el barrio Modelo Norte de Barrios Unidos. Un tinto para empezar la jornada y un beso de la mujer a la que había prometido amar y respetar siempre, fue su aliento para salir a camellar.
“Él siempre salía desde muy temprano a trabajar. Cuando se fue a ir se despidió de mí y me dijo que más tarde me llamaba, pero nunca lo hizo. Él no tuvo la culpa de lo que pasó porque Guillermo en realidad siempre fue un conductor muy responsable”, expresó la dolida mujer.
ACCIDENTE
Pasadas unas horas, un servicio hizo que el taxista de 51 años se dirigiera hasta Fontibón, localidad donde además vive su mamá. Al ver que había mucho trabajo por el recibimiento de la Selección Colombia, Guillermo decidió retornar hasta la avenida Ciudad de Cali para ver qué más podía conseguir, pero su recorrido terminó cuando al pasar por el barrio La Capilla (calle 22 con carrera 94) se encontró de frente con la muerte.
“Eso fue a las 6:15 a.m. Guillermo venía por el carril que era. El carro en donde venían los policías pasó a toda velocidad e invadió el carril del taxista. El compañero no tuvo oportunidad de reaccionar. Cuando los tipos se bajaron del carro olían muchísimo a trago, pero al ver lo que habían hecho se pasmaron. Yo creo que de la misma borrachera se quedó dormido el conductor”, contó un testigo del hecho.
El conductor del carro particular tiene 21 años y es subintendente de la Policía, quien llevaba poco tiempo de salir de la escuela. La mujer que iba en compañía de los uniformados fue trasladada a la Clínica Colombia.
MUERTE
Luego de ver lo que había pasado, varios taxistas llegaron al lugar para poder ayudar a su compañero pero ya era demasiado tarde. El taxista quien era reconocido en el gremio por ser buena gente y sencillo, había quedado aprisionado en el vehículo y pese a que los paramédicos hicieron lo posible por salvarle la vida dentro de la ambulancia no fue posible.
Cuando vieron que ya no había nada que hacer, a los policías se los llevaron supuestamente para el CAI de Hayuelos pero nos fuimos para allá y no los tenían. El levantamiento del cuerpo de Guillermo fue muy rápido, lo pasaron de una vez al carro de criminalística y los policías que estaban ahí nos decían que no fuéramos chismosos y que trabajáramos”, comentó un taxista.
Ahora, los familiares del conductor piden a la Policía que aclare la situación y que quede claro que Guillermo López no fue el culpable de lo que pasó. “Él siempre era muy precavido, entonces que no nos vengan a decir que prácticamente fue culpa de él y que murió fue por
no llevar el cinturón de seguridad, porque no es así.
"No es justo que un hombre de bien como mi esposo muera por culpa de borrachos”, añadió la esposa.
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