El Eln reconoció su participación en los hechos que condujeron a la muerte de 13 personas en Magüí Payán, en Nariño. (Lea aquí: Ejército confirmó muerte de cuatro personas por enfrentamiento en Nariño)
En un comunicado, el Frente de Guerra Suroccidental del Eln relató que desde hace un año en la zona se posicionaron las Guerrillas Unidas del Pacífico, “quienes desconocen las formas organizativas comunitarias, cometiendo atropellos contra la vida, costumbres, bienes y la convivencia pacífica”. Entre junio y octubre de este año, según la insurgencia, han asesinado a nueve pobladores y líderes.
Unidades del Frente de Guerra llegaron el 27 de noviembre a la vereda Pueblo Nuevo, de Magüí Payán, para “establecer una conversación con las GUP... pero, ante nuestro requerimiento, la reacción de ellos fue la de abrir fuego contra nuestras unidades guerrilleras, obligándolas a responder”.
En el enfrentamiento, continúa el comunicado, murieron 10 integrantes de las guerrillas unidas, “entre ellos sus jefes: Álvaro, Samuel, Marcos y Tigre. También detuvimos otros 6, quienes luego de ser desarmados quedaron en libertad, por ser gente de la comunidad puesta al servicio de esa banda por un sueldo”.
El Eln afirma que fueron las guerrillas unidas quienes atacaron de forma intencional a la población civil del caserío y asesinaron a dos personas e hirieron a tres, entre ellas dos menores de edad.
Aunque la insurgencia asegura que diez de los muertos eran miembros de las guerrillas unidas, la Defensoría confirmó que se trataba de campesinos y entre las víctimas se cuenta Edinson Ortiz Bolaños, del consejo comunitario Manos Amigas, así como una mujer de 22 años que estaba embarazada.
Esta sería una violación al cese el fuego, por estar afectando a la población civil.
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