La guerrilla de las Farc arremetió este viernes contra el expresidente Andrés Pastrana, que participó en un fracasado proceso de paz hace una década, y le acusó de que "incumplió sus promesas".
"Nadie en Colombia tuvo tanto respaldo como él, como su gobierno, para desarrollar un proceso de paz que sacara a Colombia de la guerra, pero él dilapidó esa oportunidad, incumplió sus promesas", dijo a la prensa Pablo Catatumbo, uno de los delegados de las Farc en los diálogos de paz con el gobierno colombiano en La Habana.
La guerrilla lanzó dardos contra Pastrana luego de que el exmandatario saliera al paso de las críticas que las Farc le hicieron el miércoles, en el sexto aniversario de la muerte de su fundador, Manuel Marulanda, "Tirofijo", responsabilizándolo por el fracaso del anterior proceso de paz.
En una carta de respuesta a las Farc, publicada en varios medios de comunicación, Pastrana negó que hubiera engañado a Marulanda en los diálogos de paz de El Caguán (desarrollados de fines de 1998 a comienzos de 2002) y afirmó haberse jugado "a fondo por la paz, sin ambiciones personalistas ni mezquinos cálculos políticos".
Las Farc y el Gobierno Nacional están discutiendo actualmente el espinoso tema de las drogas ilícitas, tercero de los seis puntos de la agenda de negociaciones, que buscan poner fin a un conflicto armado de medio siglo.
Pastrana se jactó en su carta de "haber colocado a las Farc en las listas terroristas del mundo civilizado" y criticó los diálogos de La Habana, iniciados en noviembre de 2012 por el actual presidente colombiano Juan Manuel Santos, afirmando que se trata de "una olla de arreglos secretos que ya comienza a oler mal".
La réplica de las Farc no se hizo esperar: "Pastrana que dice que aquí estamos haciendo pactos secretos, lo invitamos a que venga a La Habana para que se informe porque tal vez por vivir por allá tan alejado en España está un poco desinformado", dijo Catatumbo.
"Si él no pudo, pues que le dé la oportunidad a otros (de alcanzar la paz), ya su cuarto de hora pasó", agregó.
El actual ciclo de conversaciones -el vigésimo segundo- culminará el domingo, pero es improbable que las partes logren cerrar ese día el tema de las drogas.
Ambas partes ya consensuaron los temas de desarrollo rural y participación política, y deben abordar todavía el abandono de las armas, la reparación de las víctimas y el mecanismo de refrendación de un eventual acuerdo de paz.
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