Al tiempo que las Farc anunciaron que hoy podrían ser liberados en Arauca dos de los cinco secuestrados en poder de la guerrilla, su jefe máximo, Timoleón Jiménez, ‘Timochenko, dijo que el Gobierno ha “destruido la confianza” al suspender las negociaciones de paz tras el secuestro del general Rubén Darío Alzate, comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta Titán.
‘Timochenko’ aseguró que el Presidente “tumbó el tablero donde jugábamos la partida, destruyó la confianza” y advirtió que “las cosas no podrán reanudarse así no más, habrá que hacer diversas consideraciones”.
Igualmente, consideró que la petición de Santos de realizar una rápida liberación de los secuestrados “equivale a un secuestro del proceso de paz” y que su negativa a un cese el fuego bilateral, reclamado por distintos sectores de la sociedad en la última semana, “pone de manifiesto que el proceso de paz no es más que un simple instrumento en una estrategia final de guerra”.
El líder guerrillero acusó también al Gobierno colombiano de no respetar las condiciones pactadas para la liberación del general secuestrado hace más de ocho días en zona rural del Chocó. “Santos insiste en arrebatar por la fuerza a los prisioneros... Es decir, viola nuevamente lo pactado”, expresó en un comunicado.
Afirmó que “insisten en un rescate por la fuerza, quizás en precipitar una desgracia que ninguno desea. Esa es la verdadera catadura del régimen”.
Sobre las denuncias de las Farc, el viceministro de la Defensa, Jorge Bedoya, dijo que la situación es muy clara: “Esto se rige por unos protocolos previamente establecidos; en el momento en que las Farc hagan entrega de la información de las coordenadas del área geográfica donde se suspenderían las operaciones militares, ahí empieza a correr el reloj para que los secuestrados puedan volver a sus familias”.
Explicó que así se está haciendo en Arauca, donde “el sábado a las 16:00 horas entregaron la información y el domingo a las 00:00 horas se inició suspensión de las operaciones y eso va marchando como un relojito. Así que lo único que falta es que las Farc entreguen la información para proceder con el protocolo en el área geográfica del Chocó”, indicó.
El Viceministro recordó que desde hace tres años se están llevando a cabo liberaciones bajo estos protocolos y no hay razón alguna por la cual en este caso no se puedan hacer, “si las Farc cumplen con lo que se comprometieron hacer”.
El funcionario insistió que “no es cierto que las Fuerzas Militares estén obstaculizando la liberación. Se han suspendido operaciones por parte de la Fuerza Pública en el área geográfica que se nos entregó, así es como son los protocolos, pero eso no implica por supuesto ni el retiro ni el despeje de las zonas geográficas de la presencia de nuestra Fuerza Pública”.
LIBERACIONES
Entre tanto, hoy podrían ser liberados dos de los cinco secuestrados en poder de la guerrilla. Así lo anunciaron las Farc a través de un comunicado en el que precisaron que desde la madrugada de ayer están dadas las condiciones para iniciar el operativo humanitario.
Según el documento, retornarían a la libertad después de dos semanas de plagio los soldados profesionales Paulo César Rivera y Jonathan Andrés Díaz.
La guerrilla recordó que los uniformados están en su poder bajo la condición de “prisioneros de guerra” y manifestó además que “esperamos que esta acción humanitaria que adelantan los países garantes del proceso de paz (Cuba y Noruega) y el Comité Internacional de la Cruz Roja, se realice sin sobresaltos y exitosamente”.
El Ejército colombiano ya suspendió sus actividades en esa región, en un procedimiento que permite la liberación de los secuestrados en condiciones seguras y con la intermediación de una misión humanitaria del Comité Internacional de la Cruz Roja.
SIN PRESIONES
El presidente de Fedegan, José Félix Lafaurie, afirmó que el Gobierno Nacional no puede ceder ante las presiones que viene realizando el líder de las Farc, Rodrigo Londoño, alias Timochenko, para reanudar el proceso de paz. “Si el Gobierno se arruga, terminará aceptando las condiciones por parte de la guerrilla”.
De acuerdo con el dirigente ganadero, la guerrilla está buscando presionar al Gobierno para conseguir un cese bilateral lo que se puede avalar.
Según el presidente de Fedegán, si el Gobierno acepta las condiciones de la subversión, va a terminar en un nivel peor a los anteriores procesos de paz iniciados.
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