Nicolás Esteban Rocha Duarte, de 19 años de edad, fue enviado a la cárcel La Modelo, luego de haber asesinado a su madre, según confesó, por al parecer no darle dinero para salir a departir con sus amigos durante el fin de semana.
De acuerdo con las autoridades, el joven habría apuñalado a Gladys Duarte, como fue identificada su progenitora, en más de 30 ocasiones, dejándole heridas mortales en el cuerpo, luego de una discusión por el supuesto mal comportamiento de su hijo que la obligaba a negarle los medios económicos para que saliera a una fiesta.
La mujer, afirmaron la Policía y el CTI, era víctima de constantes ofensas y agresiones por parte de Rocha, quien le gritaba constantemente por no darle dinero, consciente de la carencia de éste que sufría su madre.
El día del homicidio se encontró a Nicolás Esteban con las manos ensangrentadas frente al cuerpo de su madre, tras supuestamente haber consumido horas antes alucinógenos en compañía de sus compañeros de bachillerato.
Este hecho que tuvo lugar en el barrio Garcés Navas, el pasado 25 de noviembre de 2014, no se había podido resolver hasta que este lunes una juez lo sentenció a 22 años de prisión, tras un preacuerdo con la defensa del sentenciado, que logró el descuento de la pena al cambiar el delito de homicidio agravado por homicidio simple.
Rocha durante su audiencia pública pidió perdón a los ciudadanos luego de aceptar su culpa, aunque la juez, que se mostró dolida por el hecho, le aseguró que “ninguna súplica disculpa o petición de perdón podrá devolverle la vida a su madre y resarcir el dolor causado a la familia y a la sociedad por el acto criminal”.
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