La visita del Papa Francisco representa uno de los eventos más importantes del país en los últimos años, y desde el anunció varias instituciones, comunidades y ciudadanos se ha estado preparando para recibir al máximo jerarca de la iglesia Católica.
A pesar de que la Constitución de 1991 señala que Colombia es un Estado laico, ha sido predominante el catolicismo por factores históricos, culturales y sociales, esto nos lleva a pensar que la visita del Sumo Pontífice marca la vida millones de feligreses y también de aquellos que profesan otra religión.
No obstante, es importante entender que en el país se practican otras religiones que son una minoría frente a los más de 45,3 millones de católicos que hay en Colombia, pero que tienen una visión de lo que representa la figura del Santo Padre y su visita al país.
Para el Pastor Edgar Castaño Díaz, presidente de la Confederación Evangélica de Colombia, la visita del Papa despierta ese fervor cristiano de la iglesia católica y alimenta lo que la institución religiosa debe hacer en una nación.
“Nosotros respetamos la venida del Papa y esperamos que la iglesia pueda disfrutar un espacio de relaciones espirituales con su líder, creemos que es importante que puedan celebrar. Nosotros tenemos unas diferencias religiosas, pero un valor en la madures del evangelio y lo que nosotros creemos es que todos tenemos espacio y oportunidad para participar en una nación”, indica Castaño.
Por su parte, para Ahmad Tayel, director de la mezquita Abu Baker de Bogotá, el Papa Francisco es un gran símbolo del diálogo intereligioso, cultural y viene en representación de una visión religiosa.
“La visita es muy constructiva porque es un símbolo de la paz y viene en un momento en el que estamos viviendo una nueva realidad con un proceso de negociaciones, que nos han permitido reflejar los resultados de la paz. Su visita confirma que está aceptando lo que estamos haciendo”, señala Tayel.
Asimismo, otra de las comunidades religiosas que tienen más de 4000 miembros en Bogotá dieron su opinión sobre la presencia del Papa Francisco en el país y lo que representa en un futuro su visita.
Alfredo Goldschmidt, Gran Rabino del Centro Israelita de Bogotá, resaltó la presencia del Sumo Pontífice y señaló que traerá un efecto positivo para calmar los ánimos políticos, empezar a hablar de reconciliación, y mejorar este país, especialmente en el tema de la paz.
“Nosotros como pueblo judío, admiramos, reconocemos la importancia y rol trascendental que puede tener el Papa Francisco, aunque en etapas anteriores el pueblo judío sufrió mucho por la intención de convertirnos al cristianismo y luego del Concilio Vaticano II de 1965 las cosas cambiaron y empezó una etapa de dialogo que nos permite tener hoy en día muchas cosas en común”, indica Goldschmidt.
Asimismo, el gran Rabino señala que aunque Colombia es un Estado laico, la inmensa mayoría de la población es católica y cree que la presencia será muy positiva para el país.
“Creo que nos sirve la presencia del Papa en el momento en que firmamos la paz, él nos va a dar un mensaje de reconciliación y de valores, esto nos cae bien, especialmente para calmar los ánimos de las fuerzas políticas, un poco extremas, entre quienes critican y apoyan el acuerdo”, indicó el Rabino.
Por su parte, monseñor Fabio Suescún, obispo castrense de Colombia, señala que la visita “tiene todas las características para aliviar nuestras penas, dolores y alentarnos para seguir adelante plenos de esperanza y entusiasmo”.
Finalmente, un sector que tiene ciertas consideraciones sobre la visita del Pontífice son los ateos, quienes no están de acuerdo con la financiación de la visita del Santo Padre con recursos públicos y el mensaje de su agenda política.
“No estamos de acuerdo con la financiación que se ha dado con respecto a la visita del Papa, porque este es un Estado laico y debe respetarse eso y no debe financiarse con ningún recurso del país”, indica Paola Nieto, Asociación de Ateos de Bogotá.
Asimismo, Jorge González, miembro de la asociación, señala que los mensajes que va a dar el Papa Francisco “son una intromisión a la política pública, en temas como la eutanasia, el matrimonio igualitario, la adopción de niños por parte de parejas del mismo sexo”.
Frente a las criticas que han surgido por la financiación con recursos públicos, monseñor Fabio Suescún indica que “un Estado laico, es un Estado que no es ateo, que respeta la creencia en Dios y que no tiene una religión oficial, pero que respeta a las diferencias”.
Colombia esta lista para la visita del Sumo Pontífice, y se espera que su presencia traiga consigo un cambio, especialmente en la espiritualidad, los temas de paz y la reconciliación de los colombianos.
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