Con la entrada en vigencia del mecanismo de la vía rápida legislativa especial para tramitar las reformas que permitan reglamentar los acuerdos de paz con las FARC, se destapó una nueva controversia al interior del Congreso de la República, el cual literalmente deberá aprobar sin reformar dichas propuestas cuando se tramiten.
Voces en tal sentido que cuestionan este procedimiento las ha hecho el Centro Democrático, desde donde se ha manifestado que el Congreso pierde su facultad de proponer y sólo acepta lo que lleve el Gobierno.
El exprocurador Alejandro Ordóñez, igualmente, expresó una posición similar, al manifestar que la discusión en adelante dependerá de lo que se quiera llevar por parte del Gobierno y de las Farc.
La vía rápida legislativa quedó ratificada en el fallo de la Corte Constitucional en el sentido que el Senado y la Cámara deberán aprobar los proyectos, tanto las leyes como las reformas constitucionales, con base a lo que se radique y los cambios sólo serán avalados por el Gobierno.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, sostuvo que estos proyectos buscan es ratificar los diversos acuerdos a los que se llegó con las FARC, los cuales fueron mejorados y ya ratificados con el llamado Acuerdo del Teatro Colón.
Para el presidente de la Comisión Primera del Senado, Carlos Fernando Motoa, esa decisión de tramitar los proyectos así la aprobó el propio Congreso al dar tramitar el Acto Legislativo de la Paz.
Explicó que la discusión formalmente seguirá igual a como es hoy. En el caso concreto de la Ley de Amnistía, indicó que será discutida el lunes próximo y se espera que sea votada el martes.
Este tipo de proyectos obliga a que tengan una mayoría calificada, es decir que en comisión se debe tener al menos trece votos y en plenaria, 65.
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