La Procuraduría General de la Nación advirtió que la crisis humanitaria y de hacinamiento de la cárcel Bellavista de Medellín se hace más crítica ante la eventualidad de que 785 detenidos temporales del departamento pudieran ser recluidos allí.
En un informe realizado por el Ministerio Público, como parte de una acción de tutela que tramitó el Juzgado 33 Administrativo de Oralidad del Circuito de Medellín, quedó en evidencia que en las estaciones de competencia del Comando de Policía del Valle de Aburrá hay 653 personas privadas de la libertad, quienes además permanecen “en totales condiciones de indignidad y violación de sus derechos”.
A este panorama se suman 71 personas en los calabozos del CTI y 61 detenidos en municipios del departamento, que no han ingresado a un establecimiento carcelario por falta de cupo en los centros de reclusión bajo el control del Inpec.
“Pese a las diferentes órdenes judiciales que han tutelado y reconocido los derechos fundamentales de los internos del Establecimiento Carcelario y Penitenciario Bellavista y a los esfuerzos que ha realizado la Dirección Nacional del Inpec por cumplir estas órdenes, cada vez se hace más difícil y complicado la salvaguarda de los derechos que le asiste a la población privada de la libertad”, señaló la entidad.
El pasado 16 de febrero el Grupo de Derechos Humanos de la Procuraduría Regional de Antioquía realizó una visita a la cárcel Bellavista y encontró que actualmente hay 4199 personas internas pese a que la capacidad de ese centro es de 2424.
En la visita se evidenció que los patios Cuatro y Ocho son los espacios con mayor hacinamiento, por encima del 300 %, lo que ha llevado a los propios internos a poner un “pico y placa” para poder dormir.
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