El director de Medicina Legal, Carlos Eduardo Valdés, dio a conocer el resultado de las necropsias realizadas a los 12 cuerpos de los integrantes de la fuerza pública que fueron asesinados en Boyacá por el ELN y señaló que en la totalidad de los cuerpos se descartó que fueran rematados por tiro de gracia.
Valdés explicó que tras los estudios del Instituto se logró identificar plenamente la totalidad de los cuerpos y señaló que en ninguno de los cuerpos de los 11 militares y un policía se encontraron señales de disparos a contacto. "La causa de la muerte fue politraumatismo múltiple, ocasionado por el paso de proyectil de arma de fuego de alta velocidad tipo fusil".
Valdés también explicó que en los 12 cuerpos trasladados a Bogotá por las autoridades no hay signos que indiquen el uso de material explosivo. "Ninguno de los cuerpos presenta lesiones por uso de explosivos... Por los estudios en todos los casos se descartó el uso de explosivos", señaló Valdés.
Los cuerpos de los 11 militares y un patrullero de la Policía, que fallecieron tras el ataque del ELN en Güicán, Boyacá, serán entregados en las próximas horas a los familiares, tras la finalización del estudio de necropsia.
El director del Instituto confirmó que el último examen que se llevará a cabo es la prueba de las prendas. “El estudio de las prendas de vestir confirmaría si las distancias de disparos fueron a larga o corta distancia. En este momento por los estudios de las lesiones en los cuerpos todos presentan trayectorias de disparos hechos a larga distancia”, dijo Valdés.
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