De manera directa y sin mayores explicaciones, el presidente Juan Manuel Santos reversó la estructura organizativa que le dio a la Presidencia de la República desde 2014, año en que inició su segundo mandato hasta el 2018.
"En cuanto a los cambios en la Casa de Nariño, se harán modificaciones en su estructura y también de nombres, que en su momento anunciaré. Entretanto, el ministro consejero Rafael Pardo quedará encargado del Ministerio de la Presidencia, que –a propósito– volverá a ser lo que era antes: la Secretaría General de la Presidencia", expresó Santos, luego de decir quiénes eran sus nuevos ministros.
Esa estructura la renovó precisamente para darle un mayor dinamismo al gobierno, por lo que copió un modelo muy europeo y creó las figuras de ministros consejeros y terminó a los consejeros presidenciales que habían funcionado durante al menos los últimos tres gobiernos en Colombia.
Santos dio paso así en agosto de 2014 a los ministros de la Presidencia, del posconflicto y derechos humanos, de gobierno y de comunicaciones. El de mayor significado fue el ministro de la Presidencia, con la cual se acababa al 'todo poderoso' secretario general de la Presidencia de la República, el funcionario de quien siempre se ha dicho tiene el computador de la burocracia estatal.
Fue así como llegó al gobierno un hombre que poco había sido cercano a Santos pero que tiene un hábil manejo político en todos los sectores, Néstor Humberto Martínez, quien además de brillar con luz propia, es de la cuerda del vicepresidente Germán Vargas Lleras.
Martínez asume esa posición en medio de críticas de los sectores cercanos a Santos por el poder que le estaba dando al vargismo, reclamo que fue muy evidente del Partido de la U, que en el primer gobierno tuvo en Juan Carlos Pinzón y Aurelio Iragorri -dos miembros de esa colectividad- en la Secretaría General.
El arranque de la figura de Martínez en el Ministerio de la Presidencia generó más impasses que aciertos al presidente Santos, por ejemplo fueron muy claras sus discusiones en público como en privado con el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo. El hombre fuerte de la Presidencia de la República apenas duró casi diez meses en el cargo y se fue en junio de 2014.
Luego el primer mandatario le apostó a una persona que le fuera más cercana, por lo que designó a María Lorena Gutiérrez, quien hasta mediados de junio de 2015 era consejera para el buen gobierno.
Gutiérrez, cercana a la U, nunca tuvo una buena relación con Martínez durante el tiempo en que fue ministro de la Presidencia, incluso tomó fuerza la semana anterior que su renuncia al cargo fue porque el presidente Juan Manuel Santos terminó incluyéndolo en la terna para fiscal general de la Nación, pese a que ella le recomendó no lo postulara.
En los próximos días Santos anunciará a los nuevos titulares de cargos en la estructura de la Presidencia de la República, los cuales serán con un enfoque hacia el posconflicto.
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