Un año de trabajo comunitario deberá pagar el joven que fue declarado como responsable del accidente en que Yadira Perdomo quedó parapléjica por una “broma” de sus compañeros de colegio.
La diligencia se desarrolló este martes a puerta cerrada en los juzgados de infancia y adolescencia, donde un juez condenó a Nicolás Hernández, por su responsabilidad en los hechos que terminaron lesionando a la joven.
La Fiscalía General de la Nación señaló a Hernández responsable del delito de lesiones personales culposas, por empujar a su compañera en un salón de clase, lo cual la dejó en silla de ruedas de por vida. Sin embargo, este delito no contempla sanción privativa de la libertad, por lo que se ordena el trabajo comunitario.
Al final de la audiencia Yadira Perdomo se declaró conforme, pues ve que al fin se realizó un correctivo contra las personas que le hicieron daño. "Se ganó hoy una batalla judicial logrando que condenaron a los responsables de mi lesión", señaló la joven.
Este hecho marca un precedente debido a que es la primera condena en el marco del primer juicio en Colombia de reclamación jurídica por matoneo.
LA HISTORIA DEL MATONEO
Todo esto se remonta a agosto de 2009 cuando Perdomo estaba en décimo grado en el Gimnasio Campestre Los Alpes, donde estudiaba el bachillerato y fue lanzada por sus compañeros del tercer piso de un edificio del colegio.
En el caso también están involucradas una profesora y una enfermera del colegio, señaladas de los delitos de lesiones personales y omisión de socorro.
Por su parte, la defensa de Yadira solicitó se vincule a este caso al rector del colegio por presuntamente haber entregado un falso testimonio en el caso.
Desde el accidente, Yadira Perdomo se dedicó a promover campañas en contra del matoneo en colegios, empresas y entidades oficiales de Bogotá y ciudades del país. Y mediante su página en Facebook, Unidos Seremos Escuchados, USE, promueve acciones para que no le pase a nadie lo que le pasó a ella.
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