La visita hermética del senador Iván Cepeda al cabecilla de las Farc, Ricardo Palmera, alias “Simón Trinidad” en una cárcel de E.U., abre nuevamente el debate sobre la posibilidad de que el jefe guerrillero ocupe un lugar en las conversaciones, solicitud hecha por el grupo subversivo desde el inicio de los diálogos, a finales del 2012.
La discusión se centra ahora en saber si E.U. daría su brazo a torcer, y en un gesto de apoyo al proceso de paz en su recta final, da un indulto a “Trinidad” para aportarle desde su experiencia todo lo que esté a su alcance en las conversaciones Gobierno-Farc.
Consultado el senador Cepeda sobre el encuentro con Palmera, el congresista indicó a El Colombiano que la entrevista contó con la aprobación de ambas delegaciones al argumentar que “no hay ningún tipo de gestiones que se hagan en el contexto de paz sin autorización. Cualquier tipo de gestión debe contar con esa autorización previa”.
Sin embargo, el senador, apelando al compromiso de confidencialidad, no quiso entrar en detalles sobre lo que podría aportarle “Trinidad” a los diálogos, ni tampoco comentar sobre el estado de ánimo o la integridad del insurgente, condenado a 60 años de prisión por el secuestro de tres ciudadanos estadounidenses en el 2003.
¿PODRÍA HABER INDULTO?
Desde el inicio de los diálogos la guerrilla ha insistido en que Palmera debería ocupar un silla en las conversaciones.
El 2 de mayo de 2013, y mediante un comunicado, alias “Iván Márquez” convocó a la solidaridad internacional y a las organizaciones sociales “a conformar comités que nos ayuden en esta justa batalla política por su libertad y su necesaria participación en la mesa de diálogo”.
Este punto se hizo tan necesario para los guerrilleros, que el año pasado en la visita del delegado de E.U. a Cuba, Bernard Aronson, se trató el asunto con los delegados de la guerrilla. La respuesta fue más diplomática y el funcionario estadounidense se limitó a decir que debía consultarlo.
Desde ese momento, y hoy, luego de la visita de Cepeda, la pregunta que surge es si el jefe guerrillero podría recibir un indulto y viajar a La Habana.
Mauricio Jaramillo, profesor de relaciones internacionales de la Universidad del Rosario, explica la poca probabilidad de un indulto para “Trinidad”, pues según el experto, en E.U. hay un principio y es no negociar con terroristas, y desde 1997, esta guerrilla hace parte de la lista de organizaciones terroristas del Departamento de Estado.
“Imposible no es porque Colombia podría pedirle a E.U., mediante la canciller María Ángela Holguín, que considere sacar de la lista a las Farc, y ahí se puede abrir una ventana. Sin embargo creo que las posibilidades son remotas”, argumenta Jaramillo.
El asunto pasaría entonces más por una discusión interna en la justicia de E.U., y aunque el presidente Barack Obama tiene algunas facultades de conceder algún tipo de indultos, explica el docente de Derecho Internacional de la Universidad de La Sabana, Julián Huertas, los jueces jugarían un rol principal en la decisión.
“Es claro que el Gobierno ha hecho lobby en E.U. para este tema. Se debe esperar la respuesta del gobierno de ese país”, dice Huertas.
¿QUÉ APORTA A LA MESA?
La experiencia de “Simón Trinidad” en negociaciones entre el Gobierno y las Farc como la de San Vicente del Caguán, sería el mayor aporte del subversivo a la mesa de diálogos. Así lo afirma Carlos Lozano, director del semanario Voz.
Para Lozano, la liberación de Palmera sería un acto de paz de un país que le ha aportado mucho a la guerra. “Hay una expectativa que tiene incluso las propias Farc y es que hagan parte de la mesa como un homenaje a su persistencia por los largos años de cautiverio que ha padecido y por un crimen que él no cometió”.
Pero la llegada de “Trinidad” a Cuba es una posibilidad que el senador por el Centro Democrático, Alfredo Rangel, ve muy lejana, y expresa que delitos como los cometidos por el jefe guerrillero no deben tener ningún indulto, “y deben pagarse con cárcel y no con la siembra de lechugas o haciendo parques, como pretende este Gobierno”.
El próximo jueves el presidente Juan Manuel Santos visitará la Casa Blanca. Su agenda estará centrada en elapoyo al proceso de paz, pero, dicen los expertos, el tema de “Simón Trinidad” saldrá a flote en un último intento para llevar el guerrillero a la mesa, tal como lo han solicitado las Farc en 3 años de negociación.
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