La promesa generada del fin del conflicto con las Farc, tras la firma esperada por 52 años, implicará mucho trabajo para implementar los acuerdos.
Así lo estiman diferentes sectores, un día después, cuando inicia la transición hacia un país distinto. La directora del Centro Internacional para la Justicia Transicional (ICTJ por sus siglas en inglés), María Camila Moreno, señaló en Cartagena que “el acuerdo debe ser implementado de una manera que responda a las necesidades y expectativas de las víctimas y de la sociedad, y construye las bases para la paz".
En diálogo con Colprensa Moreno explicó que la implementación de los acuerdos pone al país en un escenario de transición que podría llegar a tomar una década, para poder decir que realmente se pasó de una situación ‘A’ a una ‘B’.
Entre tanto, es “acertado hablar de postacuerdo, no de postconflicto, porque sabemos que el conflicto sigue activo, por lo menos, con el ELN. ‘Postacuerdos’ y sí una fase de transición que empieza”.
Este martes, la campaña Por Una Paz Completa reiteró su solicitud para que se avance en el proceso con el ELN, luego que esa organización anunciara cese de hostilidades para garantizar la votación del plebiscito del próximo domingo.
“Esperamos que el Gobierno Nacional se disponga a avanzar en la instalación de la mesa en Quito y el cumplimiento de la agenda pactada, logrando así la posibilidad de acabar la guerra en el país de manera definitiva”, indicó la Campaña.
Entre tanto, el director de la Comisión Colombiana de Juristas, Gustavo Gallón, consideró que se trata de un esfuerzo serio y robusto para proporcionar justicia a las víctimas y, en ese sentido, destacó la creación de la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad que será la encargada de crear la política contra el neoparamilitarismo, entre otros.
“Si un acuerdo de paz no se cumple, la paz fracasa. Es muy importante que le hayan dedicado especial atención al cumplimiento de los acuerdos y entre ellos está la Comisión”, dijo.
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