Me di cuenta que existía una gran coincidencia en el contenido de sus puntos de vista con los reparos que yo había hecho sobre el manejo del Partido en esta misma columna de opinión, desde hace ya varios meses.
No oculto la satisfacción, entonces, de estar de acuerdo con el ex presidente Samper en ese enfoque.
Con el humor que le es característico - al parecer es asunto de familia si uno lee a su hermano y a su sobrino, de los cuales suelo ser lector frecuente -, el ex presidente dice que el Partido Liberal es hoy lo contrario a la sandía: “rojo hacia afuera y verde hacia adentro”, esto es, un partido de simples apariencias pues se le proclama como una corriente social demócrata pero aplica o desarrolla las prácticas de un partido de centro derecha, lo cual resulta ser cierto pero desde cuando César Gaviria , El Privatizador, se apoderó de la estructura Liberal, incluso imponiendo al doctor Pardo, su discípulo predilecto, en la jefatura y candidatura del Partido, pero con los resultados catastróficos ya conocidos. Con todo, y mediante argucias deplorables, el jefe y candidato derrotado, permanece al frente del timón, enroscado con los parlamentarios, con quienes cambia favores a través del Banco de Avales y de créditos electorales a la carta.
El ex presidente Samper quiere hacer política a “base de ideas, de iniciativas, de abrir espacios, de debatir” en los foros de Café País que va a adelantar. “Lo que quiero – le dijo a Margarita Vidal -, es llenar un espacio alternativo a lo que ha sido el ejercicio político en este país, en los últimos 8 años. A mí me sorprende que el único espacio abierto sea el de centro derecha…;”
Dentro de esa perspectiva, celebro que por fin se ponga en marcha la idea de rescatar el liberalismo como fuerza política mayoritaria de nuestra nación, y de ahí que resulte pertinente recordar que en forma oportuna advertimos que el partido liberal, para ser opción de poder en el 2014, tenía que rectificar la línea política que había practicado durante la última década, y apuntamos, además, que si se quería evitar la catástrofe anunciada, el PLC debía adherir a la candidatura del doctor Juan Manuel Santos, quien había hecho durante su campaña una inteligente apertura ideológica de atracción al liberalismo , postura que justificaba la alianza programática en que habíamos insistido.
Finalmente, habrá que decir que del proceso de la reunificación del liberalismo no será ajeno el presidente Santos. Porque éste ha querido dejar claro que la orientación de su gobierno no es la de centro derecha, sino de la más pura inspiración social demócrata: tema para las mesas de discusión de Café País, donde ya se respira un refrescante aroma liberal.
PD. Leí los primeros artículos de la serie de ex presidentes escritos por el columnista de El Universal, Jaime Angulo Bossa. ¡Magníficos!
*Ex congresista, ex ministro, ex embajador.
edmundolopezg@hotmail.com
Comentarios ()