Columna


De secretario de tránsito a vergüenza nacional

REBECA GONZÁLEZ DE LEÓN

16 de julio de 2012 12:00 AM

REBECA GONZÁLEZ DE LEÓN

16 de julio de 2012 12:00 AM

Turbaco, un municipio cercano a Cartagena, últimamente ha dado mucho de qué hablar. Comenzando por el famoso  burro que Silvio Carraquilla  quería regalarle a Obama cuando vino a la Cumbre de las Américas, hecho que fue noticia en todo el mundo por  aquel gesto pintoresco de pretender que el presidente de los Estados Unidos se llevara de vuelta a su país un  burro turbaquero, y lo instalará en los jardines de la casa blanca.
Pero recientemente, el escándalo que ya es de carácter nacional, y que precisamente viene del municipio de Turbaco, lo protagoniza el secretario de tránsito de dicho lugar. Se trata del señor Modesto de la Cruz Carrasquilla (que espero que no sea familiar de Silvio). Este hombre, siguiendo los pasos del senador Merlano, se le dio por conducir en estado de alicoramiento. La policía le hizo un comparendo el cual el funcionario pagó al día siguiente y le suspendió la licencia preventivamente.
En un homenaje al cinismo, el Secretario de Tránsito de Turbaco, se defendió diciendo: “es imposible desde el punto de vista químico que una persona que consuma cerveza venga totalmente embriagada con 8 o 10 cervezas, que eso fue lo máximo que me pude haber tomado. Hay unos medicamentos que alteran eso en un momento determinado y yo he venido tomando medicamentos porque tengo problemas de salud”.
Vamos por partes: primero, según datos de la policía, la prueba de alcoholemia realizada al secretario de tránsito de Tubarco arrojó como resultado 1.73, un grado bastante alto. Segundo, es indignante que sea la autoridad del tránsito la que esté dando el mal ejemplo. Tercero, yo sé que no todos los organismos son iguales, pero creo que después de 7 cervezas ya el ojo comienza a bailar, ¿O  me equivoco? Cuarto, menos mal que está tomando medicamentos por sus problemas de salud el secretario de tránsito, ¿se imaginan cómo sería la borrachera si no estuviera enfermo y pudiera tomar sin ningún tipo de precauciones?
Ya que el alcalde de Turbaco, tan considerado como cómplice, habló de dar una segunda oportunidad y decidió que Modesto siguiera en el cargo, lo que uno espera es que sea el funcionario implicado quien en un gesto de respeto con la sociedad, renuncie. Con su comportamiento está demostrando que no tiene  la  autoridad suficiente para dirigir una oficina de tránsito.
Son este tipo de actuaciones por parte de los servidores públicos y funcionarios que debemos rechazar. Le quiero mandar un mensaje a la comunidad de Tubarco,  para invitarlos a que así,  con la misma valentía con la que están protestando para que no les coloquen ese famoso peaje, protesta que es justa y necesaria desde cualquier punto de vista por ser dicho peaje un completo atropello,  también alcen la voz y se hagan respetar, exigiendo la renuncia del señor Modesto De la Cruz Carrasquilla, quien hoy, infortunadamente, ya es considerado como vergüenza nacional. 

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