La Secretaría de Educación, en su visión futurista sobre la educación, viene desarrollando una serie de programas clave en este campo.
Cuando leo en este diario, El Universal, que la alcaldesa Judith Pinedo seguirá impulsando la campaña para erradicar el analfabetismo en Cartagena y seguirá haciendo entrega de megacolegios, me pregunto: ¿y los docentes de estas instituciones están capacitados para ejercer el cargo? ¿Acaso por salir del paso escogen a personas que no tienen el compromiso y la capacidad de entender que educar no es sólo enseñar? Educar antes que nada es formar. Formar a los humanos para que se conviertan en personas de bien, útiles en una sociedad.
El alumno es un imitador del docente, se da cuenta de lo mínimo: su expresión, sus dichos, sus ademanes, su vestimenta, su habilidad, su inteligencia. Parecería que ellos no miran esos detalles pero a la hora de censurar a un docente son los inquisidores más contundentes. Es por eso que ser docente implica antes que nada una vocación de amor y de ello depende que ese ser en formación salga adelante y se forje una vida digna para alcanzar su bienestar.
Hablando con el Dr. Julio Alandete, Secretario de Educación, de quien admiro: su gestión en el cargo que ocupa, su capacidad de asombro y satisfacción por todo lo que se ha hecho y sigue haciéndose por la educación, me informa que “El propósito es que los maestros desarrollen competencias actitudinales, comportamentales, profesionales y cognitivas, que potencien en ellos la implementación de estrategias y modelos de enseñanza-aprendizaje que garanticen una mayor efectividad en el desarrollo académico y formativo de los estudiantes”. La Secretaría de Educación Distrital invirtió más de mil millones de pesos para que universidades con trayectoria reconocida, como la Universidad de Cartagena, la Tecnológica de Bolívar, la Universidad Católica, entre otras, desarrollen estos talleres de capacitación conducentes a crédito para ascender en el escalafón nacional de docentes, la que me parece una excelente noticia, que contribuye a que los docentes, en sus capacitaciones, sean multiplicadores en el desarrollo de las competencias antes descritas. ¡Felicitaciones!
Ahora bien, me asalta la duda en lo siguiente: en el mes de octubre se elegirá nuevo alcalde y por ende nuevo gabinete, séquitos, parces, brother, llaverías. Cada vez que entra alguien a gobernar llega con “Nuevas ideas de cambio”, dicen que quieren a sacar a flote a la ciudad, ahora sí, ya no más a la corrupción, no más aumento en los impuestos, sí a inversión en obras…; ¿Y todo lo que se ha desarrollado? Necesita continuidad, pero lo dejan abandonado porque esos no son sus intereses y, entonces, todas esas inversiones millonarias pasan a ser un espíritu agobiado a punto de ser aniquilado, un árbol que pide agua a gritos, como pasa con todo en esta ciudad. Un mínimo ejemplo: el parque Espíritu del manglar.
Espero leer pronto las propuestas de los candidatos para las elecciones que se avecinan, propuestas que se cumplan de verdad y no que maquillen con su verborrea, porque el papel aguanta pero las necesidades de los cartageneros no dan espera.
Candidatos: ¿tienen verdadera vocación para gobernar?
*Escritora
licorcione@gmail.com
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