Gobiernos, violaciones, los TLC

En febrero del 2011, una misión de alto nivel de la OIT visitó a Colombia y habló muy fuerte sobre violaciones e inequidad sindical y laboral.

El 7 de abril del 2011, los gobiernos de Santos y Obama, acordaron compromisos, fechas y metas para respetar los derechos de los trabajadores y aprobar el TLC.
También, prohibir el uso indebido de CTA, los contratos civiles, contratos sindicales y las OPS, que esconden la relación laboral y desconocen los derechos de los trabajadores. El abuso con estas figuras no tiene precedentes y es denigrante para los trabajadores, al igual que el horario diurno hasta las 10 de la noche y la reforma pensional de AUV.
Desde 1986 se han cometido al menos 10.887 hechos de violencia contra sindicalistas y de estos 2.872 fueron homicidios.
Durante el gobierno de Santos han asesinado a 23 sindicalistas, y en 2011 van 7.
En abril del 2011, 25 trabajadores del Club de Suboficiales de Cartagena fundaron el sindicato Sintraclubnacar y presentaron Pliego de peticiones, despertando la ira de su gerente y los altos mandos de la Armada en Cartagena.
Los trabajadores denunciaron en la CUT, como afiliados, que hay órdenes precisas de despedir y acabar el sindicato. De ser cierto, es un mal precedente para la institución castrense en los derechos que debe garantizar el Estado al personal civil, violando el art- 1, 4, 13, 39. 53,55, 93, y los Art- 353 y 354 del CST, el Art- 200 Código Penal, Art- 5 ley 1309/ 09, Convenios 87 y 98 OIT, el Bloque de Constitucionalidad.
Esta persecución sindical muestra que el Gobierno anda por un lado en torno al TLC y los empresarios y servidores públicos, por otro.
Es plausible que el presidente Santos señale la necesidad de un equilibrio entre los derechos de las empresas y los de los trabajadores.
Que la informalidad es una negación total de los derechos de los trabajadores y de los sindicatos en Colombia.
Ojalá estos acuerdos no sean una simple proclama formal de los dos gobiernos para silenciar los movimientos sindicales afiliados a la CSI y CSA.
Las cifras hablan por sí solas: en Colombia hubo el 63,12% de los asesinatos de sindicalistas en el mundo durante la última década.
Empleados públicos y multinacionales, conscientes que cometen varios delitos, impiden la creación de sindicatos, su afiliación y la negociación colectiva. Los casos más aberrantes, además del Club Naval de Suboficiales de Cartagena, en Seatech, Tubos del Caribe, Mexiquem, Electricaribe, Muelles el Bosque y Abocol, entre otros.
Sería oportuno para el Gobierno nacional, y directamente el procurador, Defensor del Pueblo, ministro de defensa, Angelino y el mismo Santos, a propósito del compromiso del gobierno con Obama del 7 de Abril del 2011, investiguen estos hechos graves contra la ley y la CP.
Como están tipificados como unos delitos, ejemplarmente tendrán que recibir sanción legal que incluye multas y al servidor público, procesos disciplinarios.
Es inaplazable que el Gobierno le cumpla al país y desde la Presidencia, Vicepresidencia y ministerios emitan resoluciones y decretos a todos los servidores públicos que manejan recurso humano y política estatal, para que empiecen a honrar sus compromisos con la OIT, el sindicalismo mundial, el gobierno y los congresistas de los EUA.