Pasaron las consultas internas de los partidos políticos para escoger sus candidatos de cara a las próximas elecciones de alcaldes y gobernadores. De la misma manera se comienzan a organizar una serie de debates por parte de los medios de comunicación para conocer las propuestas de gobierno de los candidatos a estas corporaciones públicas.
En el pasado Foro “Expogestión Caribe” el presidente Juan Manuel Santos nos hizo un llamado para que en las elecciones de octubre eligiéramos mandatarios regionales, más por su capacidad gerencial, honestidad y transparencia, que por su condición política y económica. Si nosotros hiciéramos caso a esta sugerencia, de seguro tendremos mejores posibilidades de progreso económico en nuestras ciudades y departamentos. ¡Ya me imagino a mis lectores, preguntándose, donde están estos candidatos con esas tres características! Pues para eso son los debates públicos, allí se van a dar cuenta quienes verdaderamente están preparados profesional y éticamente para administrar los recursos de su municipio o departamento.
Por lo general la gente sale aburrida e inconforme de estos debates, porque los entrevistadores no estaban lo suficientemente preparados, porque los temas escogidos no tienen relevancia en las necesidades primordiales de la gente o porque son muy largos y mal desarrollados. Para que tenga una idea de cómo detectar un mal o buen candidato, le sugiero lo siguiente:
Hay una regla de oro que nunca se cumple en los debates. Leer la hoja de vida de los candidatos para conocer sus estudios, experiencia y logros en su carrera profesional. Inmediatamente deben exigir a los organizadores del debate mostrar los antecedentes disciplinarios, para verificar si han sido sancionados disciplinaria o fiscalmente, o si tienen alguna investigación abierta ya sea en la Fiscalía, Procuraduría o Contraloría. Con estos dos filtros, ya usted tiene un 70% de su elección definida.
Pero como dice el dicho, “no todo lo que brilla es oro”, y es importante que indague sobre su vida familiar y los negocios en los cuales se mueve. Otro aspecto no menos importante son los financiadores de la campaña y los líderes políticos que lo asesoran o respaldan. Aquí nos toca copiarles a los gringos su lógica para aceptar o rechazar a alguien. Dime con quién andas y te diré quién eres.
En nuestra región Caribe se ha vuelto costumbre que los candidatos compren a firmas especializadas los planes o programas de desarrollo que dicen que van a implementar en su mandato. Para detectar este tipo de candidatos, sólo debe observar que en sus discursos prometen y prometen que van a hacer esto y lo otro, pero nunca son capaces de decir cómo, cuándo y con qué lo van hacer. Por último, no olvide el orden personal y la forma de expresarse. A muchos mandatarios locales los han devuelto de los ministerios y demás entidades públicas en Bogotá porque no les creen.
Si después de todos estos filtros, el candidato no lo convence, entonces usted debe votar en blanco. ¡Pero vote!, por el bien de nuestra democracia.
idangond@hotmail.com
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