Siempre en el impreso del Colegio Montessori de Cartagena nos acogimos a las doctrinas de María Montessori: “Cuando se deja al niño un poco de espacio en el mundo y en el tiempo, este como primera manifestación en su defensa proclama: quiero hacerlo yo…; ayúdame a hacerlo solo”. Este impulso sacó adelante a muchos de nuestros alumnos, porque sabemos que educar no es trasmitir cultura sino facilitarle hallar su propio yo, con sus riquezas interiores. A la muestra un botón. Es el caso de nuestra ex alumna Judith Pinedo cuando llegó al Colegio Montessori en los años sesenta, con sus dos hermanas menores, Eulalia e Isabel.
Al poco tiempo percibimos en ella impulsos de liderazgo, de sacar adelante sus propósitos. No era excelente en sus estudios (aún se conservan los cuadros de honor del colegio) sino que conseguía arrastrar a los compañeros con iniciativas y proyectos. Era parte de su personalidad de no tener miedo para enfrentarse, y reafirmó su seguridad escribiendo su columna en El Universal, en la que profesaba su espíritu para la lucha.
Todos los cartageneros hemos visto su desempeño a pesar del sinnúmero de oponentes y ha salidos airosa. No dudo de que en el futuro se enfrentará a posiciones de mayor responsabilidad con el ímpetu que la caracteriza.
Recuerdo cómo ha sido la campaña de muchas mujeres en Colombia, no sólo para lograr el voto femenino, sino para participar en su vida política: Esmeralda Arboleda de Uribe, mujer emprendedora; Carmen Rocha; y María Eugenia Rojas, eslabón para que en el gobierno de su padre, Rojas Pinilla, aprobarán el voto femenino. De allí surgió en el país la “Unión de Ciudadanas de Colombia”, encargada de divulgar la importancia del voto para nosotras. Representé en Cartagena a esa agremiación y muchas mujeres dictamos conferencias en el Teatro Heredia para divulgar las ventajas que nos traería ese voto.
La primera mujer en Cartagena que fue a un cuerpo colegiado fue Josefina de Gómez Naar y dos años después, Josefina y yo estuvimos en la Asamblea de Bolívar, la una por el partido Conservador y yo por el Partido Liberal.
El mundo cambió mucho y hay mujeres presidentes en América Latina, y en Colombia, abogadas, jueces, magistradas, embajadoras, arquitectas, ingenieras, médicas, en la industria, en la Banca, mujeres por doquier, dando fe de su desempeño.
Entre las noticias buenas de El Universal fue que la ESE pasara a manos del Distrito y Judith Pinedo retomará el control.
Otra noticia buena es que la Alcaldesa fue finalista (entre 168 alcaldes y 11 gobernadores) en la convocatoria “mujeres gobernantes”, compartiendo cuarta categoría con los mandatarios de Bucaramanga y Cúcuta.
Tememos a la política local, y ya lanzaron nombres para la próxima Alcaldía. Hay que dejar que Judith desarrolle sus iniciativas, como reformar el mercado de Bazurto y construir mercados sectoriales. Importa que ejerza sus influencias en otros sectores, como la doble calzada hasta La Escollera y el túnel de Crespo. Aunque los mayores como yo no logremos verlos terminados, otros los disfrutarán. Sé que contará con el apoyo de muchas personas.
marite@montessoricartagena.edu.co
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