Bajo la directriz de su Plan de Desarrollo “Todos somos parte”, con resultados muy satisfactorios avanza la Universidad de Cartagena en la consolidación de su estrategia de fortalecimiento en las diferentes líneas que conforman su objeto y promisorio encargo, tanto en el frente académico como en el administrativo, de infraestructura, investigativo, internacional y de extensión y bienestar.
Es indiscutible que cuanto se ha avanzado en el mejoramiento continuo de la calidad académica en la centenaria alma máter cartagenera y en todas las áreas que conforman el objeto de ese centro de educación superior tan determinante en la historia de esta zona del país, en su progreso y desarrollo, tiene la huella afirmativa de un compromiso con lo público como eje de políticas encaminadas a ampliar el espectro de la universidad como aliada insustituible y necesaria del núcleo humano y social en el cual se asienta.
De un trabajo mancomunado, sistemático y puntual, cuyos resultados están acopiándose en beneficio del conjunto de la comunidad cartagenera y regional y no solo de la universidad como epicentro de esas transformaciones. Y todo, conforme el compromiso de los estamentos universitarios de trabajar en equipo para alcanzar los presupuestos institucionales plasmados en ese retador Plan de Desarrollo “Todos somos parte”, liderado por Germán Anaya Sierra, un sincelejano que asumió con constancia y cabal competencia el desafío de hacer de la excelencia académica y administrativa el quehacer de la Universidad de Cartagena en estos difíciles tiempos.
El buen desempeño y positiva gestión que al frente de la Universidad de Cartagena viene cumpliendo su Rector, su equipo de trabajo y la comunidad universitaria comprometida en hacer de su claustro escenario permanente de la excelencia académica y la calidad de sus procesos administrativos, es ratificado por los indicadores efectivos obtenidos y por los reconocimientos otorgados por el Ministerio de Educación Nacional por la acreditación de alta calidad en la mayoría de sus programas en el 2010.
De igual modo, por la vinculación a Colciencias en calidad de becarios de 45 jóvenes de la Universidad de Cartagena para adelantar investigaciones en diferentes áreas del saber, además de la selección por parte de esa entidad de cuatro proyectos prioritarios de salud cuyo desarrollo está estrechamente asociado con el mejoramiento de indicadores de saneamiento y salubridad en la comunidad cartagenera.
Todo cuanto vienen a confirmar los positivos logros obtenidos por la Universidad de Cartagena, es que la universidad pública sí es viable administrativa, financiera y académicamente cuando se regenta con competencia, idoneidad y transparencia. Y cuando todos sus integrantes son parte comprometida con el proyecto que guía y orienta su destino hacia metas de excelencia en sus procesos, tanto aquellos que involucran el componente académico y de acreditación como los administrativos y operativos inherentes a su naturaleza de institución pública con fines sociales.
Enhorabuena, la senda por la cual hoy transita la venerable Universidad de Cartagena.
*Poeta
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