Columna


Minería en Colombia III

RAFAEL ENRIQUE LEÓN PADILLA

07 de septiembre de 2012 12:00 AM

Continuando con el tema de la minería en el país, señalamos que la aplicación de fórmulas para lo que el Gobierno llama la buena salud fiscal, busca incentivar la inversión extrajera que produce serias complicaciones a la economía colombiana. Es evidente que de la Inversión Extranjera Directa por más de 14.000 millones de dólares, sustento de la expansión productiva en el país, el 70% está destinado al sector extractivista, y para ello se exigen garantías leoninas. Por ejemplo, se impone la reducción del déficit fiscal, para asegurar el pago de la deuda externa que alcanza a 82.000 millones de dólares; la renuncia de control a los capitales golondrinas, que pueden entrar y salir libremente, extrayendo gran parte del capital productivo debido a las altas tasas que les ofrece Colombia, muy por encima del 1% de interés máximo que pueda otorgar el sistema financiero norteamericano, arrastrando Colombia la mayor desestabilización en materia cambiaria.
La entrada de estos capitales son los causantes de la sobrevaluación del peso colombiano, y su retiro, el deterioro progresivo de la industria y la manufactura, las últimas cifras del DANE registran que para el presente trimestre la industria sufrió un bajón del 0,9%, confirmando los pronósticos recesivos. Las gabelas tributarias al capital invertido en minería son un descaro, se estima que en el 2010 las multinacionales debieron pagar en impuestos alrededor de 15,3 billones de pesos, y de ello sólo cancelaron 5,6 billones, acumulando a sus ganancias 9,7 billones de pesos adicionales, más que las regalías que pagan, 6,4 billones.
Las transnacionales lograron a través del FMI la reforma a las regalías un duro raponazo que producirá un profundo estrangulamiento fiscal a los municipios y departamentos. El 30% de las regalías, serán destinadas a un Fondo de Estabilidad manejado por el Banco de la República, de conocida ejecutoria autónoma al Gobierno y más atento de las orientaciones del mismo FMI, otro 30% de las regalías lo manejaran los bancos extranjeros con intereses precarios que no alcanzan el 1%, dizque para controlar la inflación, otra medida “sesuda” del FMI. Se pregunta uno: ¿Por qué razón hay que financiar el presupuesto nacional mediante endeudamiento con la banca internacional con intereses por encima del 10%, mientras se les condonan impuestos billonarios a las multinacionales mineras?
La generación de empleo es otra falacia inventada por la gran propaganda burguesa, que no cesa en publicitar las bondades en materia de empleo que ofrecen la multinacionales de la gran minería, fresca está en nuestra memoria las acciones de masas en Casanare y el Meta, poblaciones levantadas en clara exigencias de trabajo para los moradores de Tauramena y Puerto Gaitán, luchas que nos enseñaron la defensa por la dignidad y el trabajo decente o digno, denunciaron: la contratación indirecta a través de CTA, el tratamiento inhumano por las extensas jornadas de trabajo, bajos salarios, desconocimiento de los derechos salariales. La contratación directa no alcanza a la cuarta parte de los trabajadores, el resto lo constituyen trabajadores subcontratados por empresas sub contratistas. Igual sucede en REFICAR, que investigada por la Procuraduría y la Contraloría.

*CUT BOLÍVAR

subdirectivacutbolivar@gmail.com

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