Columna


Visión Colombia 2019

GIL ALBERTO FALCÓN PRASCA

01 de abril de 2011 12:00 AM

GIL ALBERTO FALCÓN PRASCA

01 de abril de 2011 12:00 AM

Es común ver a muchos convencidos de que las cosas han cambiado y mejorado en el gobierno de JMSC. En esto no hay que desconocer el papel de Angelino Garzón, quien supuestamente muestra la cara social y bondadosa.
Como vicepresidente mantiene una campaña mentirosa, diciendo que en Colombia todo es normalidad con los DDHH y DIH, para que se firme y entre en vigencia el TLC en la Unión Europea y los EUA. Esta actitud también la muestra ante la OIT y la comunidad internacional.
El problema no es de las personas sino de las políticas. El gobierno de Santos está insertado en el programa estratégico de la derecha fascista llamado “Visión Colombia Centenario 2019”, que propone que en 2020 se ha debido acabar la insurgencia y cooptado el movimiento social.
En el PND 2010-2014 “Prosperidad para Todos” y los hechos e informes recientes, como el de Human Rights Watch y el alto comisionado ONU para los DDHH, se ve que detrás de la prosperidad se continúan las masacres, desapariciones, asesinatos y violación a los DDHH.
Sólo cambian gestos y nombres: al paramilitarismo se le llama “Bacrim” y lo presentan como delincuencia común, y al chantaje con la fuerza, lo llaman concertación.
JMSC fue ministro de Defensa de AUV y entonces su primo Pacho, vicepresidente, estigmatizaba al movimiento social y hoy lo sigue haciendo desde RCN.
Su estrategia es habilitar las relaciones internacionales que faciliten los negocios de las transnacionales y sus socios locales. Con este propósito vienen la entrega absoluta de la soberanía y el despojo legalizado.
El PND busca desarticular el país y devolverle el poder administrativo a los gamonales, además de ganar centralización política con sus locomotoras, que siguen siendo un fracaso en desarrollo y política social.
Hay que resaltar las grandes ganancias de las multinacionales a costa de todas las violaciones, pérdidas de vida por las pésimas condiciones laborales, ante lo cual el gobierno Santos se hace el ciego y el sordo.
El Congreso de unidad, no de la república, le otorgó facultades a JMSC para crear 6 ministerios y reestructurar la máquina de inteligencia para perseguir y extorsionar (DAS) y el elefante más grande de la mafia y la corrupción, el DNE.
Los verdaderos rostros de Santos, G. Vargas y Angelino, se ven en la reforma política, que elimina los derechos a votar de quienes estuvimos en la campaña de abstencionismo, limitando a la oposición, el PDA.
La Ley de Tierras no se mete con los grandes latifundios mafiosos, no se devuelve la tierra, ni se garantiza la reparación al pequeño y mediano propietario que vivió todos los vejámenes del terrorismo de Estado, que se le obliga a encadenarse al agronegocio o a vender su propiedad recién devuelta.
Se negoció con las Cortes y se paró la investigación contra la parapolítica, se apoyó un Procurador General que pasando factura a todo el que haya hecho oposición a AUV.
La OIT, como instrumento de la ONU, obedece a las políticas de Estados parte de los grupos G-20 y G-8, que hacen la guerra y luego dan los dineros para la reconstrucción.
Ante este panorama de profundización del neoliberalismo y el cinismo de la oligarquía, en América los países sometidos y explotados por el capitalismo y la oligarquía mundial, debemos levantarnos, como sucede en el mundo árabe.

*CUT BOLIVAR

cutbolivar@gmail.com
 

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