Desde que la Major League Baseball (MLB) puso sus ojos en Colombia como destino y semillero de grandes prospectos para las organizaciones de Grandes Ligas, conseguir una firma se convirtió en el sueño de miles de jóvenes bolivarenses que practican ‘pelota caliente’.
Es por eso que los padres de familia ven el profesionalismo como una oportunidad de oro para conseguir una mejor calidad de vida.
Sin embargo, el camino es largo y difícil porque no todos logran este objetivo y es cuando vienen las frustraciones que son muy difíciles de manejar.
Sobre este aspecto hay que decirle a los papás que lo más importante es la formación integral de sus hijos. Ellos nunca deben dejar de lado su educación. Si no puede ser jugador profesional puede ser un profesional en otra área.
Los cazatalentos vienen con frecuencia a Colombia porque se han dado cuenta que aquí hay mucho potencial.
Los peloteros que han llegado a Grandes Ligas de nuestro país han sido unos grandes embajadores.
Orlando ‘Ñato’ Ramírez, Joaquín Gutiérrez, Édgar Rentería, Orlando Cabrera, Julio Teherán, José Quintana, entre otros, se han convertido en los referentes de las nuevas generaciones de peloteros que sueñan con emular sus hazañas.
No cabe duda que la actuación de Colombia en el Clásico Mundial fue fundamental para que las demás potencias en béisbol fijaran su atención en nuestro país. Colombia no es la ‘Cenicienta’. Ahora se le ve con otros ojos porque nuestros peloteros tienen calidad.
A los padres de familia hay que decirles que no es necesario llevarse a sus hijos a formarse a otros países porque aquí hay instructores muy buenos y academias que no tienen nada que envidiarle a otras del exterior.
Hace días, Orlando Cabrera dijo una frase que es muy cierta: “estamos en presencia de la mejor generación de peloteros de nuestra historia. La calidad que tienen estos deportistas no la teníamos nosotros a esa edad”.
Juan Sebastián tiene poder
Se considera un bateador de poder, que puede llevar la pelota muy lejos para empujar carreras.Sus padres se llaman Jorge Iriarte y Tatiana Bravo. Ellos lo apoyan en todo sentido para que logre cumplir su sueño de ser firmado a las Grandes Ligas.
Estudia en el colegio Pedro de Heredia, donde cursa quinto de primaria. Su ídolo es el sincelejano Jorge Alfaro, de los Filis de Filadelfia.
Jesús, pitcher dominante
Jesús Daniel Carreazo Fernández es fanático de los Yanquis de Nueva York y su gran sueño es ser firmado por una organización de las Grandes Ligas.Nació el 13 de enero de 2005 y comenzó jugar ‘pelota caliente’ desde los 6 años con el equipo Bravitos de Lemaitre. Después pasó al Club de Leones, donde juega actualmente en el torneo Departamental de la Liga de Béisbol de Bolívar. Su rol principal en su equipo es de lanzador. Dice que tiene buen buena velocidad y gran control. También sus entrenadores lo utilizan como campocorto y outfield. Estudia en el colegio San Rafael de Torices, donde cursa séptimo grado. Sus padres son Wilfrido Carreazo y Miriam Fernández (Q.E.P.D.).
Su ídolo es Julio Teherán, de los Bravos de Atlanta.
Sebastián, velocidad y fildeo
Sebastián Nicolás Espitia Barraza vive en el municipio de San Jacinto (Bolívar) y pertenece al Club de Leones de Cartagena, donde juega como segunda base y jardinero derecho. Nació el 20 de diciembre en Cartagena. Cursa séptimo grado en la Institución Educativa Pío XII de San Jacinto. Sus padres Ángel Espitia y Elena Barraza lo apoyan desde que comenzó a jugar béisbol a los 10 años. Como segunda base sostiene que es muy rápido y tiene buenas manos a la hora fildear la pelota. El año pasado integró el equipo que representó a Colombia en un torneo en Panamá.
Su sueño es conseguir una firma, ojalá con su equipo favorito los Yanquis de Nueva York. Es admirador de Gleyber Torres, el segunda base de los Yanquis.
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