El nariñense Óscar Quiroz plantó ayer la bandera de su equipo al ganar la segunda etapa, que finalizó en Armenia y se adueñó de la casaca amarilla de líder del 58 Clásico RCN Arawak.
En un soberbio embalaje, Quiroz, del equipo Strongman, se impuso con tiempo de 3h:54:18 superando en la raya al boyacense Diego Ochoa, de EPM-Scott.
La fracción, que partió de Cali, tuvo un recorrido de 181.7 kilómetros, en terreno plano.
En la general Quiroz acumula un tiempo de 4h:30:28 y supera por 2 segundos a Ochoa y por 5 al antioqueño Juan Pablo Suárez, actual campeón del Clásico, quien se acomodó de buena forma sobre sus más connotados rivales como Óscar Sevilla y el ecuatoriano Jonathan Caicedo, campeón de la Vuelta a Colombia.
La llegada fue sobre un leve repecho, que el nariñense pudo salir adelante para vestirse de amarillo.
“Gracias a Dios y a mi equipo por este triunfo tan gratificante, es una alegría inmensa para mí y para mi familia y espero que mañana me vaya bien, me siento bien, vengo de ganar en Nariño, mi departamento, también en Soacha y ahora lo ratifico aquí en el Clásico RCN, en el que intentaré ratificar esta camiseta amarilla hasta el final”, aseguró Quiroz, de 25 años, nacido en Ipiales.
“Mañana (hoy) es una etapa intensa, con alta montaña, está la llegada a Anapoima, está La Línea, pero venimos andando muy bien, confiando en Dios que todo salga perfecto, porque tengo un gran equipo, con un gran entrenador que sabe lo que debemos hacer”, agregó Quiroz.
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