Se montó a la ‘lomita de los sustos’ con la plena confianza que alcanzaría su primera victoria en el 2015 y así fue.
Julio Teherán le dio la primera alegría del año a Colombia la tarde noche del pasado lunes al convertirse en el lanzador ganador de los Bravos de Atlanta ante los Marlins de Miami, en la primera salida de su equipo en las Grandes Ligas.
En el Marlins Park de Miami, Teherán salió a mostrar toda su grandeza, con un pitcheo inteligente frenó los bates de los locales y ayudó de muy buena forma en el triunfo de 2-1 en calidad de visitante.
“Estoy contento por la victoria. El juego fue emocionante, estuve muy concentrado en el compromiso, me entregué al máximo”, fueron sus primeras declaraciones.
Teherán, nacido y criado en el barrio Olaya Herrera, permitió ocho hits y una carrera en poco más de seis entradas. Con el bate, el cartagenero despachó un hit en tres turnos.
“Me sentí bien en todo el juego, hasta el último inning que lancé, en donde me agoté por la humedad del estadio que me estaba afectando un poco”, comentó.
Inesperadamente y luego de lanzar seis potentes entradas, con el juego 2-1 a su favor, a Teherán lo mandaron a lanzar el séptimo episodio y ahí se complicó. Dejó tres hombres de los Marlins en las almohadillas, sin outs, y le pidieron la bola. Afortunadamente, los relevistas cumplieron una magnífica labor y sacaron el cero en esa angustiosa entrada.
“Pensé que ya había acabado, nunca me imaginé que saldría en ese séptimo episodio, no me sentía preparado porque era mi primera salida en el año. No creía que me iban utilizar tan a fondo. Gracias a Dios ahí estuvo el Bullpen para entrar muy bien, asegurar la victoria y salvar mi espalda”, afirmó.
Después de una muy buena labor en el montículo, Julio reconoce que se fue al dugout haciendo mucha fuerza para que no entraran carreras en ese séptimo episodio. “Dejé las bases llenas, estaba pulseando para que una jugada así saliera y se dio un doble play y luego el último out”.
En el programa Alargue de Caracol, Teherán también se refirió a otros temas de los Bravos de Atlanta.
Por ejemplo, la sorpresiva salida de Crayg Kimber, el mejor cerrador de Atlanta en todos los tiempos con 186 juegos.
“Fue una noticia sorprendente para nosotros, pues se dio este domingo, nunca pensamos que cambiaran Kimber (ahora actúa para los Padres de San Diego), el mejor cerrador que teníamos, pero nos metimos de lleno en el juego, pensando en conseguir la primera victoria y lo logramos”.
Precisamente, Jason Grillin, quien viene procedente de los Angelinos y que en el papel reemplaza a Kimber se anotó el juego salvado ante los Marlins.
¿Cómo se ha sentido con el panameño Christian Bethancourt, el actual catcher de la plantilla?
- En las ligas menores fuimos compañeros, tenemos una gran relación de amigos. Contento con que él tenga su primer año en las Grandes Ligas. Hay buena comunicación, me conoce, sabe cuando quiero hacer un lanzamiento y eso es importante.
¿Qué concepto le merece estos Bravos de Atlanta 2015?
- El equipo ha tenido mucho movimiento, pero confío en el grupo que tenemos, pienso que haremos una gran labor en esta temporada.
Pero no llegan como favoritos...
- Siento respaldo de mis compañeros, una buena energía, con muchos jugadores jóvenes, que tienen ganas de ganar. En el primer juego derrotamos a un equipo que en el papel es mejor que nosotros y necesitamos solo de una carrera para ganar ese juego. De eso se trata.
¿Cuáles son los objetivos en esta temporada de Julio Teherán?
- Quiero ganar más de 14 partidos, llegar al Juego de las Estrellas y meterme con mi equipo en la Postemporada o quizás una Serie Mundial.
A hacer historia
Julio quiere seguir haciendo historia, así como en el 2013 cuando se convirtió en el primer lanzador colombiano en llegar a una postemporada.
Ahora luce más maduro, sus lanzamientos buscan la perfección cada día. El 2015 lo inició bien y él dará todo de sí para tener un año inolvidable.
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