La edición 105 del Tour de Francia tendrá un recorrido "para todos los públicos" que exigirá atención y esfuerzo desde su inicio, con una primera semana que tiene al pelotón atemorizado con los pavés y una crono por equipos, mientras que las dos restantes atravesarán los Alpes, Macizo Central y Pirineos con seis capítulos de alta montaña y tres finales en alto.
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El departamento de la Vandée lanzará este sábado el Tour de Francia por sexta vez en la historia, concretamente desde la Isla de Noirmoutier, a la que se accederá por el puente que une a la localidad de 4.600 habitantes con la península.
Entre tierra y mar, posiblemente con viento, el pelotón iniciará un largo viaje de 3.351 kilómetros repartidos en 21 etapas, 8 de ellas planas, 5 de perfil quebrado, 6 de montaña (3 con final en alto), 2 contrarreloj, una por equipos y otra individual; y 2 jornadas para el descanso de los protagonistas.
22 equipos con 8 corredores cada uno harán parte de la partida este sábado buscando coronar un nuevo campeón o ratificar al hasta ahora inderrocable Froome.
Tras un inicio preparado para el lucimiento de los esprinters, en la tercera jornada empieza el movimiento en la general con la cronometrada por equipos, donde podrían llegar las primeras diferencias. Si el viento no dice lo contrario, el próximo pulso entre los favoritos podría tener lugar el sexto día en el Muro de Bretaña.
Tras el paso por carreteras bretonas, la brújula escora al este para afrontar una de las etapas más temidas por el pelotón. La novena acaba en Roubaix, lo que suena a clásica, a adoquines, a traqueteo y emboscadas. Esperan 15 sectores con "pavé" y un total de 21,7 kilómetros de máxima tensión.
Para dar aliciente a la primera semana, la organización decidió otorgar bonificaciones de 3, 2 y 1 segundos en puntos estratégicos de cada etapa.
Tras la piedra de Roubaix, traslado y a descansar en los Alpes. La décima etapa entra en territorio de montaña con el trayecto entre Annecy y Le Grand Bornad, con meta a 14 kilómetros de la cima de la Colombiere. Jornada de 5 puertos que incluye el ascenso al inédito Plateau de Gières, con dos kilómetros sin asfaltar.
Al día siguiente la inédita llegada a La Rosière, primer final en alta montaña con sus 17,6 kilómetros al 5,8 por ciento de desnivel, y para finalizar el tríptico la cima mítica del Alpe d'Huez y sus 21 curvas después de aperitivos fuertes, como la Madelaine y la Croix de Fer.
La travesía del Macizo central, con el aliciente de la meta en el aeródromo de Mende, pondrá al pelotón en Carcasona, donde el Tour disfrutará de la segunda jornada de descanso antes de los Pirineos, que se estrenarán con una primera etapa clásica de alta montaña que pasará 18 kilómetros por España, en el puerto del Portillon, con meta en Bagnères de Luchon, la única incursión fuera de Francia de la edición. La meta estará a 10 kilómetros de la cima.
Al día siguiente, el Tour expondrá una emoción corta pero intensa, nada menos que la etapa más corta de los últimos 30 años, con sólo 65 kilómetros, sin un instante de tranquilidad. En una etapa de sube y baja constante, esperan los ascensos a Peyragudes, Val Louron y, sobre todo, al inédito Portet, "el nuevo Tourmalet" y techo de la carrera con sus 2.215 metros de altitud.
Tras un respiro llano hasta Pau, la decimonovena vuelve a la carga con la madre de todas las montañas, el Tourmalet de verdad, tras el Aspin y anterior al Aubisque, cuya cima está a 20 kilómetros de la llegada a Laruns.
Si hay dudas en la general, quedará la víspera de París, la cita individual de 31 kilómetros contra el reloj en el País Vascofrancés de 31 kilómetros que no paran de subir y bajar, un reto más apto para los que tengan fuerzas acumuladas que para especialistas, pues tiene cuatro cotas, la última de ellas, Pinodieta, con tramos del 21 por ciento de desnivel.
El mejor de todos entrará de amarillo el domingo día 29 en los Campos Elíseos, ya entrada la tarde.
El Tour de Francia ya está en marcha con la llegada de los equipos y sus estrellas a suelo galo, en una edición que estará marcada por la polémica decisión, ni justa o injusta, sólo a destiempo, de abalar la participación del campeón Chris Froome tras la investigación realizada por posible caso de dopaje. Finalmente este 7 de julio los equipos estarán completos para salir en la línea de partida y se espera vivir una de las carreras más emocionantes de los últimos tiempos, donde anhelamos que los colombianos sean protagonistas y uno de ellos se pueda coronar el 29 de julio en las calles de París.
Passion. Audace. Ferveur. Persévérance.
En juillet, un seul rendez-vous : le Tour de France. #TDF2018 pic.twitter.com/X4ydSMkNuj— Le Tour de France (@LeTour) 27 de junio de 2018
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