Los tres favoritos al título del Tour de Francia lograron superar la etapa más larga de esta versión sin problemas.
La cuarta jornada, que se corrió entre Saumur y Limoges con 237,5 kilómetros, apenas tuvo su punto más álgido en el embalaje final, en el que la organización tuvo que apelar al foto finish para aclarar la victoria de Marcel Kittel sobre Bryan Coquard.
La clasificación general no sufrió mayores cambios en la zona de vanguardia. Peter Sagan conservó la camiseta amarilla de líder con un acumulado de 20h 03' 02''. A 18 segundos y en el quinto puesto aparece Chris Froome como el mejor clasificado de los favoritos. Con el mismo tiempo pero en la séptima casilla está el colombiano Nairo Quintana y más atrás, en el puesto 54 y a 1' 06'', se ubica el español Alberto Contador.
Los tres corredores tendrán la primera etapa de media montaña acomodada para que ellos empiecen a tomar protagonismo, aunque el gran duelo probablemente deba esperar hasta que empiece la escalada de los pirineos.
NAIRO QUINTANA
El colombiano va consiguiendo poco a poco su objetivo para estas primera etapas del Tor de Francia, no ceder tiempo a Chris Froome y proponerle un duelo directo más adelante, en los pirineos y los alpes.
La cuarta etapa, a pesar de su extensión de 237,5 kilómetros, no trajo mayores inconvenientes al pedalista de Boyacá.
La concentración de Nairo es total. Tanta, que desde que arrancó al Tour no le ha dedicado tiempo ni a sus redes sociales. Por su mente parece que solo se cruza llegar bien a la alta montaña, su hábitat natural en estas competencias.
En la etapa 4, el corredor del Movistar arribó en la posición 44, dentro del pelotón del ganador. En la general es séptimo a 14 segundos de Peter Sagan y se mantiene con el mismo tiempo de Chris Froome, quinto.
Hasta ahora Nairo juega a lo defensivo, pero ya dejó entrever que a partir de mañana, con una quinta etapa de media montaña, las cosas podrían empezar a cambiar.
"Fue una jornada muy peligrosa, pero la hemos librado bastante bien, como viene siendo lo normal en este inicio de Tour", dijo tras arribar a la meta en Limoges.
"Esperemos que mañana el cuerpo nos reaccione bien a todos en el equipo; la llegada de la montaña significa que entramos en un terreno que se adecúa para nuestras características", sostuvo.
ALBERTO CONTADOR
En la etapa más larga del Tour entre Saumur y Limoges con una distancia de 237 kilómetros, no hubo novedades para el ciclista español. Llegó en el lote con sus principales rivales sin perder tiempo. Continúa a 48 segundos de Froome y Quintana.
ANTES DE LA ETAPA: El pedalista español del Tinkoff se quejó porque no descansó bien e igualmente dijo que aún no puede pedalear con fuerza. "Me gustaría decir que estoy mejor, pero tengo las mismas sensaciones de ayer", señaló.
EN LA CARRERA: Se mantuvo en el lote hasta el final de la etapa pero al terminar dijo que le sigue costando pedalear bien fuera del sillín, algo grave para el pedalista que está acostumbrado a subir en los ascensos, en un alto porcentaje, parado en los pedales.
DESPUÉS DE LA ETAPA
Una vez concluida la etapa dijo: "Ha sido un día muy largo, muchas horas, muchos kilómetros. Sin embargo, hemos terminado adelante, sin caídas, que es lo más importante".
QUÉ ESPERA: "Mañana es un día duro, hay que estar mentalizado para ello", aseguró Alberto Contador.
EN LAS REDES: Se limitó a saludar a sus 1'114.193 seguidores en Twitter. Igual hizo en Facebook. En tanto, en Instagram, publicó una foto de un avión con una leyenda que dice: Cuando todo parezca ir en tu contra recuerda que un avión despega contra el viento.
CHRIS FROOME
Un pequeño susto se llevó Froome en la etapa con una rotonda que el pelotón fue cerrando y cerrando. Al final el Sky recuperó la posición de su líder. Para destacar el aumento de la velocidad del equipo, que bordeó los 40 kilómetros en buena parte del recorrido, a terminar por los 50 k/h al final de la etapa.
Después de la etapa, Froome explicó que la dificultad de mezclarse con los velocistas en la línea de meta "se convierte en una gran cantidad de estrés, no queremos estar ahí arriba, queremos que los velocistas hagan su trabajo y no estar en el camino, pero las grandes vueltas se pueden ganar o perder por segundos, así que tenemos que estar adelante luchando”.
Sobre la etapa de mañana agregó: “Va a ser similar a la segunda etapa, pero más difícil, más selectiva. Probablemente habrá un par de piernas cansadas por ahí, a pesar de que en estos días han sido relativamente fáciles”.
¿Habrá batalla entre los favoritos? Froome no lo cree. "Creo que es demasiado pronto para ver una batalla verdadera, pero es sin duda será un lugar donde se sacarán diferencias en los tiempos. No va a ser un esprint masivo, tal vez es una etapa para alguien como [Julian] Alaphilippe, [Alejandro] Valverde o Dan Martin”.
Como curiosidad, la bicicleta de Froome pasó temprano por el escáner para verificar que no exista ningún motor escondido, y luego de la etapa compartió en redes su sesión de recuperación.
Nadie se libra de que le busquen un motor escondido en la bici... ni Chris Froome #TDF2016 pic.twitter.com/zHps2jcY9H
— Sergi López-Egea (@sergi_lopezegea) 5 de julio de 2016
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