Nacional volvió a mostrar la casta copera para avanzar a los cuartos de final de la Copa Suramericana, tras conseguir su tercer triunfo de la historia en Brasil, al vencer 1-0 al Vitória.
Antes de iniciar el encuentro, el técnico Juan Carlos Osorio sacó la oración que siempre lo acompaña y la recitó: “Dios, dame la serenidad de aceptar las cosas que no puedo cambiar; valor para cambiar las cosas que puedo; y sabiduría para conocer la diferencia”.
Y esta vez parece que al equipo le llegó el valor para cambiar la situación, porque el 2-2 del juego de ida en el Atanasio Girardot, favorecía a los brasileños.
Pese a que tuvo un primer tiempo discreto, en la etapa complementaria Daniel Bocanegra, al minuto 70, desequilibró el marcador a favor del conjunto antioqueño.
De esa manera Nacional recordó las gestas de 1975 cuando, como visitante, venció al Cruzeiro 3-2 y de 1993, 1-0 al Internacional.
Fue un premio a la fe de este grupo que siempre creyó que la hazaña era posible, pese a que los últimos resultados no le eran favorables.
Además, el mejor regalo de cumpleaños para el portero Franco Armani, que celebró sus 28 años siendo fundamental para mantener el cero en su portería.
Era una jornada para heroísmos, porque después de 147 partidos cumplidos este año, el equipo no baja los brazos y mantiene la esperanza de darle un título internacional a su afición, única deuda pendiente en la era del técnico Osorio.
Atrás quedó el Vitória y el próximo reto será el equipo peruano de la Universidad César Vallejo, que dejó en el camino al Bahía brasileño y en el que militan los colombianos Luis Cardoza y Donald Millán.
El conjunto inca marcha tercero en la liga de ese país y no será un escollo fácil para Nacional que está a cuatro partidos de una final continental después de 12 años, cuando precisamente lo hiciera en este mismo torneo.
Atrás quedó el Vitória y el próximo reto será el equipo peruano de la Universidad César Vallejo, que dejó en el camino al Bahía brasileño y en el que militan los colombianos Luis Cardoza y Donald Millán.
El conjunto inca marcha tercero en la liga de ese país y no será un escollo fácil para Nacional que está a cuatro partidos de una final continental después de 12 años, cuando precisamente lo hiciera en este mismo torneo.
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