Lo que empezó con tranquilidad y dentro de lo normal cambió de un momento a otro cuando los hinchas se enteraron de que las boletas para el partido Junior vs Nacional se habían agotado.
Varios de los sitios escogidos por Junior para expedir las entradas fueron averiados por los hinchas al ver que después de muchas horas de espera para adquirir la entrada se les anunciaba que se habían agotado o que el sistema se había caído.
En muchos de los sitios tuvo que intervenir el Esmad porque hubo desmanes y hasta destrozaron las puertas de algunos de los establecimientos.
Uno que sufrió las primeras arremetidas de los descontentos fue el local ubicado en la carrera 14 con La Cordialidad, al que le destrozaron algunas puertas y ventanas, y la cosa no llegó a mayores porque llegó el Esmad y pudo controlar la situación.
El propietario se quejó ante los medios diciendo que ellos no tenían la culpa de que Junior apenas les diera 1.000 entradas para vender y por lo que en menos de una hora se agotó con los que lograron adquirirlas de primero.
Otro sitio que sufrió las mismas consecuencias fue el SAO del barrio Hipódromo de Soledad, donde los hinchas destrozaron algunas puertas corredizas, por lo que tuvo que ser cerrado.
También hubo desmanes en la Calle 84 con la carrera 51B, donde al igual que los otros tuvo que hacer presencia el Esmad, porque los ánimos se exacerbaron porque les anunciaron que las entradas se habían agotado.
De igual manera se requirió la presencia de la autoridad en la Calle 70 con carrera 27; en la Calle 72 con carrera 47, en la carrera 46 entre las calles 82 y 84 y en un sector del barrio Simón Bolívar.
Algunos de los hinchas resultaron con contusiones tras enfrentarse con las autoridades.
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