Real Cartagena no pudo superar sus fantasmas y estará un año más en el inframundo del fútbol colombiano. El equipo auriverde perdió en casa ante América de Cali y se quedó sin opciones matemáticas de luchar por el ascenso mientras que la hinchada protagonizó una vergonzoza presentación al invadir el terreno de juego.
Real se jugaba la vida en la cuarta fecha del Grupo B de los cuadrangulares del Torneo Águila, pero en la cancha se vio poco de un equipo que buscaba el ascenso.
Desde el pitido inicial en el estadio Jaime Morón León, fue América el que salió con la iniciativa de controlar la pelota y buscar el resultado.
Real solo pudo dividir las opciones y apuntar al contragolpe para soñar con la victoria. Pero el sueño solo le duró hasta el minuto 40 cuando Ernesto Farías abrió el marcador tras colarse entre los centrales y definir en el área chica.
El equipo no reaccionó para la segunda mitad y América mostró que estaba para más en la cancha cartagenera. Al 55 Jeison Lucumí soltó un remate de media distancia que terminó por acabar con las ilusiones locales.
El público esperó la reacción, pero el equipo solo pudo poner ganas, insuficientes para sorprender el planteamiento táctico de los dirigidos por Hernán Torres.
Al minuto 86 parte de la barra invadió la cancha, lo que obligó a que los jugadores abandonaran corriendo el terreno de juego y el árbitro tuviera que dar por terminado el partido.
Bochornosa presentación del equipo y de los hinchas en una tarde triste para los amantes del deporte, mientras la ciudad continúa con sus celebraciones de Independencia.
Con la derrota, Real se quedó eliminado con dos puntos, los mismos de Universitario Popayán. América lidera el Grupo B con 9 unidades, seguido por Quindío con 8.
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