Cartagena tuvo una noche de fútbol de las que pocas veces ha visto en los últimos cinco años.
La hinchada cumplió al llenar un Jaime Morón que lució como en las fechas más atractivas de aquellos tiempos en los que Real Cartagena era un equipo de primera.
Y el equipo, metido y centrado en su propósito de mostrarse como un claro candidato al ascenso, salió a llevarse por delante a un Llaneros que le costó ubicarse en la cancha ante la presión del local. Pero tuvo que sufrir para quedarse con un 2-1 a favor en el duelo de ida de las semifinales del Torneo Águila. Dos goles, de Acevedo y Salcedo, dieron la victoria a los locales. La lesión de Ferreira y dos expulsiones, aportaron una cuota excesiva de sufrimiento.
Fueron 15 minutos iniciales de un dominio completo de los dirigidos por José Fernando Santa, la cabeza en el banquillo, y por David Ferreira, el líder en la cancha.
Ocho minutos bastaron para que Yainer Acevedo anotara el primer tanto con un remate desde el borde del área que finalizó una de esas jugadas colectivas que endulzan el paladar. Se juntaron con toques de primera Roy Castillo y Juan José Salcedo, que al final pivoteó a Acevedo para que enganchara tras un amague y pusiera a celebrar a los 15 mil aficionados que acudieron a la cita.
El gol subió los ánimos y Real mantuvo la intensidad en zona ofensiva. David Ferreira asumió los tiempos del partido y abrió el camino del segundo tanto al minuto 12.
El creativo profundizó con un pase largo y rastrero para que Roy Castillo recibiera en el área, intentara regatear y la pelota le quedara larga. Pero atento estaba el goleador histórico de Real, el 'Pitillo' Salcedo, que llegó de atrás y definió para el 2-0 que hacía soñar con una lluvia de goles.
Pero los de Santa apostaron por dar manejo y tras el minuto 15 cedieron la iniciativa a un Llaneros que se fue tranquilizando y que, sin ser muy claro, empezó a llevar peligro al arco de Hurtado.
Al minuto 16, el meta tuvo que exigirse para una doble atajada que evitó el descuento. Luego, Jhon Velásquez volvió a aparecerse con un remate que ponía cerca a los llaneros. La pelota pasó cerca al travesaño.
El partido se hizo de ida vuelta y Real tuvo sus aproximaciones con remates de afuera que carecieron de puntería.
Pero Real es un equipo de noches de sufrimiento y el momento llegaría a partir del minuto 31. En una acción ofensiva Ferreira recibió un golpe en la rodilla y, tras un intento por reintegrarse, tuvo que ser relevado minutos después por Carlos Echeverri.
Todavía no ingresaba Echeverri cuando Real pagó por la ausencia de su líder natural. Jugada en largo y Ramírez apareció por derecha para anotar el descuento. El estadio, hasta entonces dotado de una energía cálida, se quedó frío.
Sin Ferreira en la cancha y con un Echeverri lejos del nivel suficiente para capitanear el barco auriverde, el fútbol en el Morón empezó a parecerse al de noches más comunes en los últimos cinco años.
Un Real con ganas intentaba atacar sin una brújula que guiara el camino, mientras que la visita ponía los nervios de punta a la hinchada con contragolpes punzantes.
Los minutos pasaban y la noche se ponía en contra de los locales. Real se quedó con nueve jugadores en cancha en los últimos 15 minutos tras una roja directa a Pablo Escobar -que se fue expulsado por segunda vez consecutiva en el Morón- al 55, y otra por acumulación de amarillas a Julián Mendoza, al 75.
Lisandro Castillo, el central, se convirtió en objetivo de la hinchada por su severidad con los locales y la tribuna intentó convertirse en el décimo jugador de los amarillos.
Sin los jugadores suficientes en cancha para plantear otro juego, los de Santa tuvieron que resignarse a aguantar, a sufrir y a ver como alguno de los suyos intentaba alguna proeza con aventuras en solitario sobre zona defensiva de la visita. Ninguna tuvo efecto.
Real emocionó con unos primeros minutos remarcables, pecó al ceder la iniciativa tras irse arriba 2-0 y sufrió tras la lesión de Ferreira y las expulsiones de Escobar y Mendoza.
Ante eso, la victoria por 2-1, aunque se antoja corta de cara al duelo de vuelta, se aplaude con la misma entereza con que se aguantó un resultado que pudo irse en contra.
Rueda de prensa
Estas fueron las palabras de los técnicos del Real Cartagena y Llaneros luego del encuentro disputado en el Jaime Morón.
José Fernando Santa, técnico de Real Cartagena
[bitsontherun Vi7PsHcw]
Jairo Patiño, técnico de Llaneros
[bitsontherun 6f3vITZU]
Comentarios ()