Real Cartagena continuó moviendo corazones confirmando que es un sentimiento de ciudad.
Unas 13 mil personas asistieron este lunes al estadio Jaime Morón León a observar el triunfo de Real Cartagena ante Unión Magdalena.
Las graderías se vistieron de amarillo y verde para apoyar al equipo de José Fernando Santa.
El partido fue movido en la primera mitad, pero con pocas opciones de lado y lado. Se jugó con pierna fuerte, dinámica y orden en la cancha.
Golazo de Ferreira
El público estalló en júbilo al minuto 29 cuando David Ferreira, de “palomita”, mandó el balón al fondo de la red luego de recibir un centro de costado.
La experiencia no se improvisa y eso lo dejó bien claro el volante ofensivo que hace 18 años ayudó a ascender a Real Cartagena a la Primera División.
Ferreira es el maestro de la orquesta en el Real, que juega al son que él toca en la zona medular, en donde es amo y dueño de la gestación.
El samario, de 38 años, es el que organiza el juego, construye las jugadas de peligro en el medio, en donde toca con claridad e inteligencia. Es talento puro y gran ejemplo para las nuevas generaciones.
Ante el Unión todo giró en torno de Ferreira, la orden de Santa fue clara: “buscar a Ferreira”. Y eso hicieron sus pupilos, le dieron el balón al 10 para que el resolviera.
De la mano del 10
El fútbol de Real siguió exhibiendo claridad en la segunda mitad gracias a la buena actuación de Ferreira, todo un líder en el terreno de juego.
Entre tanto, Unión se paraba fuerte atrás y buscaba a través del contragolpe conseguir la paridad.
Pero en el fondo, Real se se puso serio, aseguró las marcas y controló las escaramuzas del equipo bananero.
Jugados 60 minutos, el local controlaba el partido con propiedad y sin ningún tipo de preocupación. Real fue en equipo corto en cada una de las líneas, lo que generó dificultad al contrario para encontrar los espacios.
El penal
A los 70, Julián Mendoza fue derribado en el área y el árbitro sancionó penal a favor del local, Yeison Perea no lo hizo efectivo, ahogando el grito de gol de la parcialidad.
Cerró el juego
Los siguientes 20 minutos, Santa dejó claro que el orden es su principal herramienta para cerrar los juegos, algo que se le criticó mucho hace algunos cuando dirigió un Real con extraordinarias condiciones ofensivas, pero pésimo desempeño defensivo.
Real jugó inteligente, armó dos líneas de cuatro definidas, copó todos los espacios y nunca se vio amenzado por el Unión.
Al final, la victoria fue justa y merecida para un Real que siguió ganando en casa. Real llegó a 14 puntos que lo situaron en la quinta posición y sus hinchas están felices.
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