El Real Madrid se aseguró el pase a los octavos de final de la Liga de Campeones tras ganar 1-0 al París Saint-Germain (PSG), este martes en el estadio Santiago Bernabéu, en partido de la cuarta jornada del torneo continental.
Nacho Fernández hizo el gol de la victoria en el templo blanco con un tiro cruzado desde la izquierda que se coló en el segundo palo la portería de PSG (35), dando a los blancos el liderato del grupo A.
El Real Madrid también se aseguró el pase a octavos gracias a que el Shaktar Donetsk se impuso 4-0 al Malmo en el otro partido de la llave.
Pese a la victoria, los blancos sufrieron mucho, superados, especialmente en la primera parte, por un PSG dominador, que tuvo las mejores ocasiones pero falló en la definición.
El meta costarricense Keylor Navas, que volvía a la portería tras su lesión, se empleó a fondo ante las llegadas de los franceses.
El delantero sueco del PSG Zlatan Ibrahimovic fue una auténtica pesadilla para la defensa blanca, poniendo el susto en el cuerpo a los aficionados blancos con un saque de falta que se fue lamiendo el palo izquierdo de Navas (29).
En los peores momentos del equipo blanco, Marcelo tuvo que salir del terreno de juego lesionado siendo sustituido por Nacho (32), que se convirtió en el revulsivo del equipo.
El canterano aprovechó un rechace a un tiro de Toni Kroos para adentrarse en el área y rematar desde la derecha con un tiro cruzado que se coló en el segundo palo (35).
Todavía no había terminado de celebrar el Real Madrid cuando el joven Adrien Rabiot, que había entrado por Marco Verratti también lesionado, soltó un tiro que se estrelló en el palo derecho de Keylor Navas (36).
Cavani tuvo el empate
El primer tiempo acabó con susto para los blancos al picar el uruguayo Edinson Cavani un balón por encima de Keylor Navas, que Raphael Varane despejó cuando ya casi se cantaba el empate (45+4).
Tras el descanso el Real Madrid trató de dar un paso adelante, llevando algo de presión a la salida del balón del PSG, pero no lograba llegar con demasiado peligro a la portería de Kevin Trapp.
El técnico blanco Rafa Benítez, cuyo equipo también perdió algo de profundidad con la salida de Marcelo, trató de dar un nuevo impulso al equipo con la entrada de Lucas Vázquez por Jesé, poco acertado (63).
El PSG empezó a notar el esfuerzo hecho en la primera parte y se mostró mucho menos dominador y con menos velocidad, lo que permitió a la defensa blanca contener mejor.
Ibrahimovic, muy activo en los primeros 45 minutos, empezó a mostrarse más estático, esperando algún balón largo para sorprender.
Los blancos empezaron en el último cuarto de hora a quedarse atrás buscando su oportunidad al contraataque gozando, al contrario que en la primera parte, de más ocasiones ante un equipo francés que en los últimos momentos cometía varias errores ante la ansiedad por conseguir el empate.
Los últimos minutos fue un toma y daca que finalmente no serviría para modificar el resultado.
Comentarios ()