Cimento, la compañía colombo-guatelmanteca que se creó como resultado de la unión de las constructora Amarilo y Spectrum, empezó su plan de inversiones en Colombia con la construcción de su primer centro comercial, al norte de Bogotá, entre Chía y Cajicá, con una inversión de 200 millones de dólares.
Este es solo el inicio de un plan de inversiones por 1.000 millones de dólares proyectado a 2019 que podría incluir al menos seis ciudades colombianas, entre ellas dos de la Costa Caribe: Cartagena y Barranquilla.
Así lo anunció Gabriel Escallón, gerente general de Cimento Inmuebles Comerciales, en entrevista con El Universal durante la celebración de Convención Latinoamericana de Centros Comerciales (RECon Latin America) que se desarrolla en Cartagena.
El modelo de negocios de Cimento es de propiedad única. Los locales no se venden, solo se concesionan o arriendan y el desarrollador es el dueño.
El primer proyecto
El primer proyecto de esta compañía es Fontanar Centro Comercial, al norte de Bogotá, con 129 mil metros cuadrados y un área rentable (GLA) de 57.000 m2. Esta obra estará lista en el último trimestre de 2015.
Escallón señaló que los centros comerciales de Cimento se distinguen por su ambiente verde, gran urbanismo, generosos en parqueaderos (el de Bogotá tendrá 2.800). “Serán centros comerciales innovadores, con corredores amplios y gran visibilidad”, dijo.
A la fecha, el 50% del centro comercial está negociado y entre sus clientes están marcas como, Éxito, Cinepolis (11 salas de cine), Pepeganga, Arturo Calle, entre otras.
Expansión
Cimento revisa seis ciudades grandes para su expansión en Colombia: Bogotá, Cali, Medellín, Cartagena y Barranquilla. “Cartagena la analizamos. Es un mercado atípico, con gran población flotante, es la capital turística del país y vemos gran interés por estudiar la ciudad”.
Hacia el 2019, Cimento tiene como meta tener 300 mil metros cuadrados de área rentable en Colombia.
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