El ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri Valencia, manifestó que después del Censo Nacional Agropecuario y con la coyuntura del dólar a más de 3 mil pesos hay que pensar en la sustitución de importaciones de cereales y leguminosas en aras controlar la balanza comercial.
Iragorri Valencia, señaló que aunque en la coyuntura actual los exportadores de los productos más codiciados en el exterior como el banano, frutas tropicales, flores o café, están aprovechando y sacando más ganancias, los no exportadores no se están viendo afectados, por lo que se empezarán a sustituir las importaciones de maíz y soya con mayores hectáreas sembradas.
"Hay que hacer un acuerdo nacional con toda la cadena, si los compradores de concentrados que adquieren el 90 por ciento de concentrado en el país, hacen un acuerdo con el Ministerio para comprar maíz nacional, pues el 92 por ciento de lo que se importa es para ellos y si se logra ese acuerdo, nosotros nos comprometemos a sembrar 600 mil hectáreas y subir la productividad de 5.2 toneladas a 6.2", indicó el Ministro.
Por otro lado, señaló que claramente el Censo muestra una situación de crisis en el campo y que todavía hay mucho por hacen en el agro colombiano. No obstante, mencionó que ahora tendrán herramientas para empezar a plantear una reforma agraria, que en ocasiones anteriores fue rechazada.
"Se necesita la reforma agraria, hay que redactarla con datos ciertos y los datos están en ese censo. Le pongo el acelerador aún con la dificultad que tiene por la necesidad de consulta previa…, la vez pasada se cayó el procedimiento por la consulta previa", explicó.
En ese sentido, Iragorri reconoció que la asistencia técnica ha sido un fracaso, por lo que será necesario repensar la manera cómo se está haciendo y que hay una brecha entre los créditos que se otorgan, que para el Ministro son positivos pero frente a la demanda de estos y el desconocimiento no se solicitan para mejorar la productividad.
Finalmente, también dijo que el problema de la concentración de tierras es otro tema en el que ya se ha venido trabajando, pues aunque haya un 70 por ciento de pequeños productores con predios menores de cinco hectáreas, ese 70 por ciento equivale al 5 por ciento de las 113 millones de hectáreas rurales.
"Hay una mala distribución de la tierra, claro, hay que sumarle a eso la que es perteneciente a comunidades indígenas que tienen 16 millones de hectáreas y las comunidades afro; pero la realidad es que tenemos que hacer una distribución de esa tierra rural, empezando por los baldíos, las tierras de los narcotraficantes y de las Farc", dijo el jefe de la cartera agropecuaria.
Y concluyó señalando que "se recuperaron 273 mil hectáreas en el Meta y en San Vicente del Caguán que estaban indebidamente en poder de las Farc, y que vamos a repartir entre los campesinos pues es más grande que el Quindío", agregó que otras 28 mil hectáreas se recuperaron tras un acuerdo con la familia Carranza y con 500 mil hectáreas más sucedió lo mismo, pero estas pertenecieron a los narcotraficantes y estaban en proceso de extinción de dominio.
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