Con un año marcado por la intensidad de la sequía en La Guajira y en Casanare, el Gobierno se vio obligado a fortalecer su músculo institucional y financiero en la atención de emergencias por lo que la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, Ungrd, invirtió 92.223 millones de pesos en la ejecución de Plan Nacional de Contingencia ante la temporada seca y la ocurrencia de un posible fenómeno de El Niño.
Así lo reveló Carlos Iván Márquez, director de la Ungrd, quien indicó que en este sentido se contemplaron acciones de asistencia humanitaria, saneamiento y atención con maquinaria. Del total invertido, el 46 por ciento del presupuesto se hizo en acciones de preparación, el 40 por ciento en respuesta a las emergencias y el resto del presupuesto en actividades de recuperación.
De acuerdo con el diagnóstico entregado por la Ungrd, en el monitoreo de las lluvias por parte del Ideam se mostraron zonas con lluvias normales, excesivas y otras con lluvias por debajo de lo normal como en los casos de Casanare y La Guajira. Cabe anotar que este año no se presentaron inundaciones masivas en las partes bajas de los ríos Magdalena y Cauca. En este sentido, en la respuesta institucional a las necesidades de los territorios a causa de la temporada seca se invirtieron, principalmente, recursos en La Guajira por $43.000 millones; en Magdalena, $12.129 millones; en Cesar $4.700 millones, y en Córdoba $4.100 millones.
“Uno de los componentes que generó la ejecución de estas acciones en pro de que las comunidades sean más resilientes fue la movilización, en donde el papel de las entidades operativas del Sistema de Gestión del Riesgo como organismos de Socorro, Ejército, Policía, Armada y la Fuerza Aérea permitió asistir a los colombianos afectados por la temporada seca de una manera rápida, digna, coordinada y eficiente”, explicó Márquez.
A pesar de esta atención y de lo que implicó mitigar la sequía en regiones como La Guajira, explicó Márquez, el país no puede bajar la guardia ante la advertencia del Ideam de que hay un 75 por ciento de probabilidad de la llegada de El Niño en enero.
“Debemos continuar y esta línea de trabajo se debe mantener”, precisó.
En ese sentido, propone que se revise el funcionamiento y la disponibilidad de recursos en los Fondos Territoriales para la Gestión del Riesgo.
OTRAS EMERGENCIAS
Además de la atención de los territorios afectados por la temporada seca, durante este año los organismos de socorro atendieron otro tipo de emergencias como los incendios forestales, que en su mayoría, explicó Márquez, fueron provocados por la mano del hombre, y las emergencias propias de la segunda temporada de lluvias.
A la fecha se han beneficiado 19.690 familias y se han entregado 20.681 kit alimentarios a las familias afectadas. También se han invertido 5.200 millones en horas de maquinaria y obras de emergencia y 1.332 millones en materiales de construcción. Estas acciones fueron ejecutadas en emergencias como la de El Castillo, Meta; Fundación, Magdalena; Donmatías y Nechí, en Antioquia y Fusagasugá, Cundinamarca. En total se han invertido 11.480 millones de pesos en la atención de esta temporada de lluvias.
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