Si está pensando en comprar casa nueva el próximo año, empiece desde ya a hacer cuentas con un 8 por ciento de más en su presupuesto. Esta es la cifra promedio que Camacol, gremio de la construcción, prevé como aumento en los precios para las unidades residenciales en el Valle de Aburrá.
En gran medida, el mayor valor final se debe a un incremento en los costos de construcción, principalmente en insumos importados. Según Camacol, 33 de 99 materiales principales para el sector han sufrido impactos por cuenta del aumento del dólar.
“Lo que esperamos es que, en 2016, los proyectos de vivienda se diseñen con materiales nacionales, para sustituir los importados y no presionar el valor final”, aseguró Sandra Forero, presidenta de Camacol.
Sin embargo, esto no sería una tarea sencilla, porque Colombia no es un gran productor de materiales como acero, cobre, componentes eléctricos, entre otros insumos.
“Mientras no consigamos en el mercado nacional la calidad de los productos que necesitamos para nuestros proyectos, por ejemplo, la cerámica, los grifos y elementos como estos, va a ser muy difícil sustituir. El efecto del dólar ha sido fuerte y se va a sentir en los precios”, acotó Miguel Greiffenstein, director de Diseño de la constructora Arconsa.
El efecto de la devaluación, “ha hecho que los costos directos sobre maquinaria y equipo aumenten (35% según Camacol) y afecten los márgenes de los constructores”, aseguró Juan Felipe Hoyos, Presidente de Coninsa Ramón H.
A esto se suma a la escasez de suelo edificable en el Valle de Aburrá, factor que presiona los costos directos.
La vivienda nueva en el Valle de Aburrá se encareció un promedio de 8,6 por ciento, entre enero y octubre pasados, frente al mismo periodo de 2014, evidenció Camacol Antioquia. Solo en estrato medio, el alza fue de 10,6 por ciento.
No obstante, el gremio edificador espera que se vendan unas 24 mil viviendas nuevas en 2016, menos de lo que se alcanzaría al cierre de 2015 (que a octubre superó las 25 mil unidades). “Se denota un crecimiento importante del mercado y esto, sumado al inicio de las obras civiles preparadas para Antioquia, configurarán un gran 2016” indicó Eduardo Loaiza Posada, gerente de Camacol Antioquia.
Las perspectivas del gremio se dan en un contexto claro. En el departamento hay, a la fecha, 21.061 viviendas en oferta, de las cuales 13.753 están en Medellín, Bello, Sabaneta y Envigado.
En el Valle de Aburrá, la clase media seguirá siendo el motor de crecimiento del sector, pues en lo corrido de 2015 las ventas en ese segmento aumentaron 25 por ciento.
“Si bien habrán ajustes en el precio, como todos los años ha sucedido, la dinámica de la clase media seguirá fuerte, por el desempeño del ingreso de los hogares y los incentivos oficiales a la tasa de interés, entre otros”, agregó Loaiza Posada.
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