Los esfuerzos que hizo el gobierno de Manolo Duque para sacar adelante las obras de reconstrucción de los colegios públicos que estaban a medias desde la administración de Dionisio Vélez aún no surten efecto, pues pese a que las obras están listas los estudiantes siguen hacinados en otras sedes.
Durante un recorrido que hizo Duque en enero pasado por las instituciones educativas afectadas, el contratista a cargo y a quien se le reasignó el proyecto desde septiembre del 2016 se comprometió a terminar las construcciones a finales de febrero.
Pese a que la promesa no se cumplió y las obras estuvieron listas hasta marzo, según lo informó la Secretaría de Educación, las obligaciones contractuales ya están cubiertas y lo que resta es responsabilidad del Distrito.
El Universal visitó los colegios públicos reconstruido y esto fue lo que se encontró:
Institución Educativa Las Gaviotas, sede Niño Jesús
La sede que debería estar atendiendo a unos 500 niños de preescolar y primaria tiene la obra lista, según lo informado por la interventoría, pero el cerramiento es deficiente y representa un riesgo para los estudiantes, de acuerdo con los padres de familia.
A pesar de que la Secretaría de Educación propuso que los estudiantes recibieran las clases mientras se realizan las obras del cerramiento, no contempladas en los trabajos contratados, los padres de familia se negaron y aseguraron que no recibirán el colegio hasta que esté todo listo.
“No recibiremos la obra hasta que esté al 100%, le hicieron una ‘pinturita’ a la pared para disimular el mal estado. Nos han evadido, desgraciadamente vamos a tener que acudir a las vías de hecho, la vez que protestamos por dos horas enseguida retomaron los trabajos, entonces vamos a programar un paro indefinido”, comentó
Fulvio Urzola, representante de los padres de familia ante el consejo directivo de Las Gaviotas.
El mes pasado, el departamento de infraestructura de la Secretaría de Educación aseguró que gestionaba la aprobación de $200 millones para el cerramiento pero según lo informado por el rector Rodolfo Díaz y los padres de familia, aún no han sido notificados de la adjudicación del contrato.
En esta ocasión no fue posible comunicarse con el funcionario a cargo.
Mercedes Ábrego, sede Sectores Unidos
Este colegio, que tiene cuatro salones, una sala de informática, dos baños y sala de profesores, y que atenderá a niños de primaria, ya está listo pero de acuerdo con los interventores aún falta corregir un rampa que no quedó conforme a las especificaciones.
El rector Alberto Rentería informó que aún no tienen fecha de entrega y que los estudiantes continúan hacinados en la sede principal del colegio en San Fernando.
En la institución hace falta la dotación de pupitres, escritorios, tableros y demás equipos que deberán tener para atender a los estudiantes y que deberán adquirirse mediante un nuevo contrato.
Ya los están usando
Las nuevas obras que sí están aprovechando son las de ampliaciones de los colegios San Lucas, en el barrio El Milagro, donde están dando clases en dos de los cuatro salones construidos y en Ambientalista en San José de los Campanos, donde se construyeron seis salones que están habilitados. Estas instituciones educativas solo esperan la inauguración oficial.
Comentarios ()