Si bien cada día son mayores las adicciones a las que se ven expuestos los niños y adolescentes, también son mayores los esfuerzos que hacen entidades sin ánimo de lucro, como Niños de Papel, para tratar de buscar solución a esa problemática que afecta al núcleo familiar sin importar el estrato social.

Las dependencias entre niños y adolescentes, sea de sustancias psicoactivas o las llamadas adicciones emergentes (videojuegos, redes sociales, celular, internet, pornografía,…) preocupan por las repercusiones que tienen a largo plazo en aspectos como el académico, familiar, social y neuropsicológico.

Según el equipo multidisciplinario de Niños de Papel, las dependencias afectan el neurodesarrollo de los niños y jóvenes, “debido a que la neurotoxicidad a la que conducen frenan e impiden que el niño y adolescente llegue a su máximo coeficiente intelectual -el cual se alcanza a los 21 años-, lo que produce cambios en la personalidad, y que de no ser tratadas a tiempo se convierten en trastornos permanentes, caracterizados por irritabilidad, agresividad, cambios bruscos del estado de ánimo y pérdida del respeto y consideración hacia los demás”.

Dicen que las dependencias tanto de sustancias psicoactivas como de las adicciones emergentes puede afectar la vulnerabilidad y activar  enfermedades mentales como trastorno bipolar, esquizofrenia, depresión mayor, trastornos de ansiedad y conductas suicidas o agresivas.

“Cuando estas enfermedades mentales aparecen se empeora el pronóstico y se produce un mayor impacto sociofamiliar, creando reacciones inadecuadas que llevan a los pacientes al maltrato, exclusión e incluso a intentos de suicidio”, dicen los expertos.

De allí la importancia de la detección temprana de esas realidades y el acudir al tratamiento adecuado para el restablecimiento de la persona y de los derechos perdidos.

Niños de Papel

Niños de Papel es una institución sin ánimo de lucro que tiene muchas raíces en Cartagena.

En sus inicios trabajó con niños de la calle, (los llamados “gamines”), a los que con tesón ayudó y erradicó del medio callejero de Cartagena. Con el tiempo, el problema social fue otro: niños y adolescentes que cayeron en las redes del microtráfico, siendo tanto vendedores como consumidores, lo que atacó directamente el núcleo de muchas familias de Cartagena y el departamento.

Hoy día trabaja además con una nueva realidad:  los problemas de salud mental en los menores de edad. Y a combatir esa nueva realidad es a lo que hoy le apunta la institución que ha sido muchas veces galardonada por su trabajo social.

Programas

Niños de Papel interviene esta problemática con sus dos programas: Espiral y Marea.

El Programa Espiral desarrollas actividades de promoción y prevención de la salud mental y del consumo de sustancias psicoactivas en menores de edad, en sus tres líneas de trabajo:

Espiral del silencio: Busca la interacción con niños, niñas jóvenes, adolescentes y padres de familia en situación de crisis, por medio de sus redes sociales, comunidades virtuales y la “línea amiga” (3152256162).

Espiral de opinión: Desarrolla en comunidades (empresariales, educativas o comunitarias) espacios de capacitación y encuentro para el intercambio de experiencias, saberes y buenas prácticas sobre las problemáticas juveniles y su abordaje. Este año se realizará el Congreso Colombiano de Salud Social y Mental en Cartagena de indias, del 19 al 21 de octubre del presente año. Este certamen será en la Gobernación de Bolívar, en convenio con la Asociación Colombiana para la Salud Mental y el Instituto Colombiano de Neurociencias.

Espiral del caracol: Desarrolla acciones y estrategias dentro de una comunidad, centradas metodológicamente en la escucha activa en un proceso de trabajo comunitario que se fundamenta en la construcción de redes sociales donde participan actores de la comunidad local para dar respuesta a problemáticas y necesidades priorizadas por ellos mismos. En este ambiente se han conformado Centros de escucha en Instituciones Educativas, se ha asesorado a otras 27 instituciones, se han capacitado 112 docentes y equipos psicosociales y se han formado 525 estudiantes y 446 familias.

Programa Marea

Niños de Papel cuenta con la única Unidad de Salud Mental en la Costa exclusiva para menores de edad con programas y tratamientos adecuados para esa etapa de la vida. Es abierta a todos los estratos y convertida en una Institución Prestadora de Servicios de Salud (IPS) tiene convenios con EPS de la región.

Ofrece los servicios de internación de tipo hospitalaria y no hospitalaria; consultoría familiar, talleres para padres consulta ambulatoria profesional (psiquiatría, medicina, psicología clínica, trabajo social, pedagogía, nutrición, terapia ocupacional) y/o diagnóstico interdisciplinario; y la modalidad de hospital día, donde se busca la nivelación de niños en disfunción psicológica,  pedagógica o social y el refuerzo y acompañamiento de niños que provienen de otros procesos.

Ofrece también, grupos de apoyo donde se busca el refuerzo en relaciones de pares con miras a la motivación y sostenimiento del cambio; internación hospitalaria exclusiva para menores de edad en crisis para manejo de síntomas e identificación de problemas e internación no hospitalaria o modelo terapéutico para el tratamiento y rehabilitación integral a niños y jóvenes con problemas de adicciones.

Si bien el infierno de un pariente drogadicto no lo quiere vivir nadie, este se incrementa cuando el problema afecta a los menores de edad. Y es allí cuando entra a jugar organizaciones como Niños de Papel.

TENGA EN CUENTA:

Los principales factores que predisponen a las adicciones y sobre los cuales se debe trabajar en promoción y prevención son:

Núcleo familiar débil o nulo; ausencia de límites y normas  en los hogares; ausencia de acompañamiento diario por parte de los padres; abuso de alcohol y otras sustancias en los padres, hermanos, familiares y amigos; ausencia o mala comunicación intrafamiliar; mal manejo del tiempo libre; exceso de gratificación; antecedentes de abuso; ambiente nocivo con alta oferta de sustancias psicoactivas a bajos precios (microtráfico); antecedentes de enfermedad mental en la familia, entre otros.