Mary-Kate y Ashley Olsen han dejado Hopllywood atrás y se han dedicado a construir un imperio de moda a través de su empresa Dualstar Entertainment Group.
A pesar de su éxito como diseñadora de modas con su firma The Row, las gemelas ahora enfrentan una demanda de unos 40 practicantes que han trabajado en Dualstar en los últimos tres años. Los aprendices han declarado que trabajan en extensas jornadas laborales sin ningún tipo de compensación.
La empresa de confección y producción ha negado las acusaciones a través de un comunicado oficial y han dicho que resolverán este asunto en los tribunales.
Diferentes medios de comunicación en la ciudad de Nueva York, se han hecho eco de las declaraciones de Shahista Lalani, una graduada de la Parsons School of Design, que realizó sus prácticas en Dualstar en 2012.
Lalani ha dicho a la publicación Page Six: ““Eres como un trabajador normal, salvo que no te pagan. Son algo crueles. Otros becarios lloraban. He visto a muchos llorar llevando los cafés o fotocopiando”.
Lalani trabajó directamente con la directora de diseño de la empresa y sobre su antigua jefa comentó: Ella era muy exigente. Yo hacía el trabajo de tres becarios. Hablaba con ella todo el día y toda la noche. Me mandaba e-mails durante la noche para el día siguiente”. Según comentó tuvo que ser hospitalizada por deshidratación, pues su semana de trabajo supera las 50 horas.
Dualstar declaró por su parte: “Las alegaciones de la queja presentada son infundadas y la compañía se defenderá de las reclamaciones de los demandantes en los tribunales, no ante los medios de comunicación", explicó su portavoz Annett Wolf.
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