Dos días durará la cantante Shakira en su tierra natal, Barranquilla; pero aunque cada vez que la hermosa artista regresa a su casa su estadía es noticia nacional, en esta oportunidad su visita relámpago se ha convertido en locura en la capital atlanticense. El motivo es que Shakira llegó en compañía de su marido, la super estrella del fútbol, Gerard Piqué y de sus dos pequeños hijos.
La sensación es que por primera vez Piqué y su hijo menor, Shasa, pisan tierra barranquillera y lo mejor según afirman los fans por las redes sociales es que la ilustre familia han destilado amabilidad por donde quieran que han sido vistos.
A su arribo en el aeropuerto Ernesto Cortizos llegaron felices y sin un asomo de incómodidad ante el acecho de los periodistas, camárografos, fotográfos y curiosos en general que esperaron por casi seis horas para tenerlos, aunque fuera un segundo enfrente y lograr capturar el momento a través de una foto o un video.
En un intento por pasar desapercibidos, la familia descendió de un avión identificado con la matrícula N6GD la pista de carga y fueron recogidos allí por una camioneta polarizada que fue abordada por los periodistas a la salida del aeropuerto. En una sorpresiva reacción Shakira bajó los vidrios de la camioneta y tanto ella como su marido y sus hijos saludaron sonrientes a los comunicadores.
"Estoy feliz, muy contento de estar aquí en Colombia, en Barranquilla, y a disfrutar con los niños. Saludos, chao”, fueron las únicas palabras del defensa del Barcelona, mientras Shakira fue más expresiva: “Primera vez en Barranquilla con mi familia. No sabemos que vamos a hacer, vamos a improvisar. Estaremos un par de días nada más”, manifestó. y hasta Milán, el hijo mayor, no se contuvo de hacerle un guiño a las cámaras y decirles que estaba supercontento.
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