México golpea a Los Zetas con captura de jefe y decomiso arsenal

Autoridades federales asestaron dos golpes al cartel de las drogas de Los Zetas, uno de los grupos más violentos del narcotráfico, con la captura de uno de sus jefes en el norte del país y el decomiso de un arsenal en el sureste de México. La Secretaría de la Defensa Nacional informó este viernes en un comunicado que detuvieron a Oscar Manuel Bernal Soriano, alias La Araña o Spider, considerado el jefe de la plaza de Los Zetas e involucrado en el asesinato en 2009 de un general retirado que fungía como jefe de la policía en una municipalidad del estado de Nuevo León. Bernal fue detenido la madrugada del jueves junto con seis presuntos cómplices en la ciudad industrial norteña de Monterrey, señaló la dependencia. El presunto jefe local está también involucrado en el secuestro y desaparición de cinco militares en una terminal de autobuses de Monterrey, la tercera mayor ciudad del país y a casi 900 kilómetros al norte de la capital mexicana. En otra acción, en el estado sureño de Tabasco, la policía federal decomisó un arsenal presuntamente de los Zetas. El arsenal de 73 armas largas de alto poder, dos cortas, 12 granadas y 2.275 cartuchos estaba oculto en un semirremolque para el traslado de caballos, informó el comisario de seguridad regional de la policía federal, Vidal Díaz Leal. Agregó que el hallazgo se registró el jueves en una carretera en el sueño estado de Tabasco, cuando agentes federales que patrullaban la zona detectaron una camioneta con el remolque. Los policías hicieron una revisión y encontraron el arsenal en un compartimiento de doble fondo del semirremolque. El vehículo era tripulado por un hombre y una mujer, considerados como miembros de los Zetas y dedicados al tráfico de armas y drogas por vía terrestre. Entre las armas se encuentran 34 AK-47, 17 tipo FAL, 13 AR-15, cinco ametralladoras y dos fusiles tipo Galil. Los agentes también incautaron dos kilogramos de cocaína. Los Zetas es uno de los carteles de las drogas más violentos y ha sido responsabilizado de diversos ataques, sobre todo en el noreste del país donde mantiene una disputa con sus antiguos aliados del cartel del Golfo. También en el sur del país, en el estado de Guerrero, la policía localizó los cadáveres de seis hombres asesinados a tiros y con huellas de tortura. Los cuerpos, cinco de ellos vendados de la cara, fueron abandonados en un poblado en las afueras del balneario turístico de Acapulco, que en los últimos años también ha padecido la violencia del narcotráfico.