La continua deforestación de las cordilleras debido a la siembra de coca y la minería han causado la sedimentación del fondo del río Cauca.A 26 mil personas asciende la cifra de damnificados que tiene el municipio de Ayapel, sur de Córdoba, por el daño en la llamada boca de Santa Anita en la que el Gobierno nacional ha invertido cerca de 30 mil millones sin que hasta el momento se haya logrado cerrarla.
De acuerdo con el informe entregado por el secretario de planeación de Ayapel, Jairo Llanos, la continua deforestación de las cordilleras debido a la siembra de coca y la minería han causado la sedimentación del fondo del río Cauca, el cual ha elevado su cota de inundación por encima del nivel normal en un metro, hecho que ha causado los estragos que vive la población en los últimos tres años.
El problema
Explicó el funcionario que desde el 2008 al 2010 el Gobierno nacional realizó una obra vial y de proteccion para evitar la posibilidad de inundacion que se llama dique carreteable entre Colorao y Nechi, Antioquia, y San Jacinto del Cauca, Bolívar.
Dicha obra la realizó a través del Instituto Nacional de Vías, Invías, con todas las especificaciones técnicas a un costo de 300 mil millones de pesos, es decir 168 millones de dólares. Sin embargo, a la obra le autorizaron posteriormente la realizacion de una compuerta para evacuar las aguas represadas en una finca que se llama Santa Anita, ubicada al costado de un cerro con el mismo nombre, al frente de la desembocadura del río Nechí que llega al río Cauca.
Llanos explicó que al terminar la obra se compactó mal el terreno y cuando los niveles del río Cauca subieron se debilitó el terraplén mal compactado y lo derribó, causando la boca de Santa Anita que tiene una longitud de 300 metros de los cuales 30 aún no han sido tapados.
Dijo que también hay otras bocas similares hechas por particulares para inundar terrenos y abonarlos o para realizar pesca con chinchorros en las bocas creadas. En total suman 1.200 metros lineales de bocas del rio Cauca que inundan el 60 por ciento del área de Ayapel desde hace tres años y que causaron 26 mil damnificados.
La boca millonaria
El funcionario en un detallado informe señala que Invías y Colombia Humanitaria se han gastado más de 30 mil millones de pesos tratando de tapar esa boca y las otras que se llaman Pedro Ignacio, Nuevo Mundo y Caregato sin que hasta el momento se hayan culminado las obras.
Llanos reiteró que el contrato aparece ya terminado pero que en realidad el problema persiste.
Lo más grave de la situación, dijo el titular de Planeación, es que Ayapel no tiene terrenos sobre esa margen del río y tampoco el departamento de Córdoba, ni la Corporación de los Valles del Sinú y San Jorge, CVS, por lo que no pueden hacer inversiones en la misma.
La única alternativa, insistió Llanos, es tocar las puertas a nivel nacional para que alerten a los departamentos de Antioquia y Bolívar para que mitiguen y ayuden a solucionar el problema que no los afecta directamente a ellos sino al municipio cordobés.
Planteó como solución temporal la canalización de los caños Barro, Muñoz, San Matías y Mojana, así como aumentar los muros de contención en Nechí y San Jacinto, así como restablecer el dique carreteable que va desde Colorao-Nechí hasta San Jacinto del Cauca y prestarle seguridad con la fuerza pública para que no vuelvan a dañar el dique carreteable, que además es la vía de acceso al municipio de Nechi el cual está aislado por vía vehicular desde hace tres años y solo se llega en lancha.
Regional
26 mil damnificados en Ayapel desde hace tres años
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