El Siglo, un corregimiento ubicado a 25 minutos de la cabecera municipal de Ciénaga de Oro, al que solo se accede en esta época del año en moto, caballo o en burro es una muestra del abandono.
Los habitantes de El Siglo, en su mayoría labriegos y jornaleros, recuerdan con tristeza como cada vez que se avecina un debate electoral el corregimiento es epicentro de políticos que llegan con sus cargamentos de mentiras y promesas, con la complicidad de falsos líderes de la región que lo que buscan es lucrarse sin importarles el bienestar de la comunidad.
Los habitantes de la región agrícola y ganadera, ante el abandono del Estado, luchan por llamar su atención para conseguir unos volcos de balasto para el arreglo de la vía y recursos que les permitan acceder a un mejor servicio de agua potable.
“El actual alcalde Plinio de Paola, no le invierte un peso al corregimiento porque en los comicios pasados en esta zona perdió y quien ganó fue el Menchy y según sus allegados los pocos votos que él sacó en el corregimiento los compraron sus líderes”, dijo uno de los habitantes de El Siglo quien señala que por ello no tienen esperanzas que llegue la inversión.
El siglo, como su nombre lo indica en relación con otros corregimientos del Departamento, tiene eso: un siglo de atraso pues los recursos que llegan por concepto de transferencias y regalías son invertidos en obras de poca monta que le dejan a los contratistas jugosas ganancias.
El corregimiento de El Siglo, no solo tiene problemas con la vía de penetración, también lo agobia el saneamiento básico, la carencia de médicos en el puesto de salud y el pésimo servicio de energía que le suministra Electricaribe, el cual a pesar de ser caro es deficiente.
A esto se agrega que la postería y las crucetas que contiene las redes en su mayoría son de madera y ya están a punto de colapsar y caer sobre las viviendas de bahareque, lo que podría ser una tragedia anunciada, según lo indica otro habitante cuya casa está en peligro porque uno de estos postes amenaza con caerle encima.
Según los afectados el servicio de energía cuando llueve es suspendido y restablecido dos días después sin explicación alguna. El único puesto de salud que tiene el Siglo está convertido en un monumento al abandono y en letrina publica y los médicos por lo general lo frecuentan en épocas de elecciones con la presencia de algunas IPS que llegan en brigadas de reconocimiento y a repartir purgantes y drogas genéricas para el dolor.
La institución educativa del corregimiento no se ha venido a pique gracias al trabajo de los docentes encabezados por el rector, quienes han diligenciado con entes no gubernamentales, la construcción de aulas y la dotación de las mismas con material didáctico y computadores.
Los habitantes exhortaron a la clase dirigente orense, en especial a los políticos que tienen aspiraciones de llegar al Concejo o a la alcaldía para que miren a este corregimiento no como un fortín político al que se llega con 50 mil pesos el día de las elecciones, sino como una comunidad sufrida que requiere con urgencia la rehabilitación de su principal vía de acceso, una obra de interés comunitario que inmortalizaría al dirigente que la gestione.
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