A la cárcel policía que compartía su casa con criminal

El policía Eder Antonio Cardona Tangarife negó que estuviera viviendo en la misma casa en la que fue capturado Jorge Luis Díaz Barrios, uno de los integrantes de las bandas criminales. En la audiencia de imputación de cargos, el abogado del patrullero, Libardo Luis López, sostuvo que su defendido se había ido de la casa porque estaba recién separado de su esposa, Diana Marcela Fernández, quien está privada de la libertad a raíz del mismo caso junto a su madre, Lucidia Rodríguez, quien es la propietaria de la vivienda. Dijo además que en el momento del allanamiento estaba en esa residencia porque tenían un hijo de 11 años a quien estaba visitando justo el jueves de la semana anterior cuando en un operativo sin precedentes, en el barrio Buenavista, fue capturado “El Mincho”, integrante de la banda Los Paisas. Su contradictoria versión no fue tenida en cuenta por la juez tercera penal municipal de Montería quien autorizó el traslado del policía a la cárcel de Corozal, sitio de reclusión de los uniformados. Entretanto, los directivos de la institución policial adelantan los trámites de rigor en aras de sacarlo de la policía. El policía dijo también que las armas encontradas en esa residencia del barrio Buenavista las tenía para defenderse porque había visto morir muchos compañeros al quedarse sin municiones. Este argumento tampoco tuvo el peso suficiente para las autoridades judiciales que consideraron que si el policía no vivía en esa casa, no tenía porque guardar allí armas y municiones para su defensa. SOBRINO DE ABOGADO El policía detenido por las autoridades, tras descubrirse que compartía casa con uno de los presuntos delincuentes más buscados de Córdoba, es natural de Lorica y en esa región es ampliamente conocido como “El chispa”. Cabe anotar que es sobrino del abogado Cruz Nel Tangarife, quien fue asesinado en Lorica el pasado mes de abril. Tangarife se había dedicado a la defensa de los integrantes de las bandas criminales en esa localidad. La situación no está nada fácil para el Policía. Por un lado, el nuevo comandante, coronel Pedro Angello Franco, señaló que hará una depuración de la institución pues tiene referencias de algunos cómplices de las bandas criminales. Más crítica aún es la situación de su familia, pues su esposa y su suegra están encarceladas, por encubrir a un hombre peligroso como “El Mincho” o el “profe” y en tercera instancia la guerra interna que se ha desatado entre las bandas criminales podría ubicarlo como miembro de un bando en particular y ello podría representar peligro para su vida.