Honduras quiere revivir pesadilla y Francia busca reparar su actuación de 2010

AP
RIBEIRAO PRETO, Brasil
14 de Junio de 2014 07:55 pm
  • Selección de Honduras. // AFP RODRIGO BUENDIA

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En Sudáfrica, los franceses vivieron una experiencia traumática y se estrellaron contra un equipo de la CONCACAF. Con un plantel renovado y más armonía, los galos buscan evitar que la historia se repita.

Frente a sí tendrán a Honduras, otra selección de CONCACAF, que anda en busca de su primer triunfo en la historia de la Copa del Mundo y que no rehuirá un solo contacto físico en la cancha para buscar ese objetivo.

"Queremos ganar, pero de ninguna manera se nos puede considerar violentos", dijo el técnico de la selección hondureña Luis Fernando Suárez, en referencia a críticas que se han hecho a su selección tras sus altercados en partidos amistosos contra Inglaterra y Brasil.

El partido del domingo en Porto Alegre, correspondiente al Grupo E, dará un indicador sobre la determinación de Francia, dirigida ahora por Didier Deschamps.

Sólo cinco jugadores quedan de aquel plantel de 2010, cuando Francia avergonzó a sus seguidores al declarar una suerte de huelga en la concentración y al terminar la fase de grupos sin una sola victoria. Empató con Uruguay y se estrelló ante México, antes de que Sudáfrica la venciera y rematara la humillación.

El plantel actual se dice hambriento, concentrado y decidido a lavar aquella afrenta.

"Desde luego, tenemos mucha ambición, pero seguimos siendo humildes, porque sabemos de dónde venimos y las cosas pueden cambiar rápido en el fútbol", dijo el volante francés Blaise Matuidi, el viernes. "No permitiremos que el optimismo nos traicione. Tenemos los pies en la tierra pero estamos al tanto de que contamos con un buen equipo y podemos hacer algo bueno en este Mundial".

El equipo se ha transformado totalmente desde que se sobrepuso a una desventaja de 2-0 en su visita a Ucrania, durante la ida del repechaje mundialista. Se impuso en la vuelta por 3-0.

Ese resultado puso fin al sufrimiento de los aficionados, y los jugadores lo han usado como catapulta para mejorar su desempeño, con 31 goles en los últimos nueve encuentros, incluida una paliza de 8-0 sobre Jamaica, justo antes de abordar el avión rumbo a Brasil.

En el partido reciente ante Inglaterra, el cual fue todo menos amistoso, Honduras mostró que no le teme al choque, y Deschamps ha advertido a sus jugadores que no deben perder la cabeza ni entrar en confrontaciones.

"Estamos listos y preparados para eso. Hemos visto sus partidos amistosos y, desde luego, son un equipo que busca el contacto físico", dijo Matuidi. "Pero no debemos perder de vista por qué estamos aquí. Pienso que podemos causarles problemas también, y sobre las jugadas rudas, habrá un árbitro ahí para imponer la ley, de modo que no nos preocupa".

El problema para Francia es que, la última vez que enfrentó a un equipo que mostró rudeza fue precisamente en la derrota ante Ucrania en la ida de la repesca. El central galo Laurent Koscielny fue expulsado en las postrimerías después de que perdió la compostura.

Hace dos años, en la Eurocopa, Zlatan Ibrahimovic y la selección sueca hostigaron a los franceses desde el comienzo y se llevaron la victoria por 2-0.

"Lo único de lo que estoy convencido es de que daremos todo, y en términos del espíritu del equipo no habrá quien nos reproche nada", dijo Matuidi.

La realidad es que Honduras debería ser el equipo preocupado, al considerar la productividad que ha lucido el ataque francés.

Pero la selección catracha exuda entusiasmo. Después de todo, está en su tercer Mundial, quiere disfrutar al máximo y sabe que cualquier triunfo le permitirá hacer historia.

A diferencia de Francia, que desea moderar el optimismo, los hondureños le dan rienda suelta, empezando por el presidente del país, Juan Orlando Hernández.

"Va a ser una locura en Honduras", dijo Hernánez el viernes en Washington, al considerar ante periodistas de su país que Honduras vencerá a Francia. "Uno a cero ganamos nosotros".

Además de Suárez, los jugadores hondureños negaron que sean desleales a la hora de meter la pierna.

"No somos agresivos, a veces con Honduras se habla de menos. No somos Francia, Brasil o Argentina, Los uruguayos, los argentinos y los ingleses son fuertes, no sólo lo es Honduras", manifestó esta semana el mediocampista Roger Espinoza.

FRANCIA INICIARÁ EN BRASIL SU CAMINO DE REPARACIÓN

Francia quiere empezar a saldar la bochornosa deuda que dejó en el Mundial de Sudáfrica 2010, en su debut contra Honduras en la Copa Mundo de Brasil 2014, el domingo en Porto Alegre.

Cuatro años después de su eliminación en primera ronda en medio de un escándalo de indisciplina, el cuadro dirigido por Didier Deschamps, capitán de la selección francesa que ganó el título mundial en 1998, buscará rehacer el prestigio francés ante un rival sin peso futbolístico.

Sin embargo, Deschamps quiere cuidarse de los excesos de confianza. Brasil "tuvo un partido difícil contra Croacia y es obvio que no tendremos un juego fácil mañana", dijo el técnico este sábado en conferencia de prensa.

Si bien los Bleus perdieron en el camino hacia Brasil a su estrella Franck Ribery por una lesión, cuentan con suficiente munición de reserva: Patrice Evra (Manchester United), Karim Benzema (Real Madrid), Olivier Giroud (Arsenal), Raphaël Varane (Real Madrid) y Paul Pogba (Juventus).

A sus 26 años, Benzema, campeón de la 'Champions' con el Real Madrid este año, asoma como el guía de los franceses en su expedición por Brasil, en la que también se cruzarán con Suiza y Ecuador en la primera fase.

Los franceses cuentan con todo a su favor para expiar las culpas de Sudáfrica y volver al club de los favoritos, a expensas de una selección de Honduras en teoría mucho más débil a la que enfrentarán en el renovado estadio Beira Rio de Porto Alegre a partir de las 19H00 GMT.

"Ahora estamos en otra Copa del Mundo, no vamos a ser juzgados por lo que hicimos hace cuatro años", declaró el técnico.

Aun con la sensible baja de Ribery, los galos quieren llegar lejos en Brasil. "Nos hemos preparado de la mejor manera desde hace cuatro semanas. Ahora hay que competir, la verdad está en el campo", destacó Deschamps.