¡Y llegó la revancha!

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CIUDAD DEL CABO, SUDÁFRICA, AP

Ofrece todo para ser un partidazo: goles, fuerza, talento, discusiones y hasta si Lionel Messi se aferra a su corona de Rey o la deja tambaleando.

Argentina y Alemania, los equipos más goleadores del campeonato, chocarán hoy, a las 9 de la mañana, por los cuartos de final de la Copa del Mundo, la misma instancia que los enfrentó en 2006 cuando los europeos ganaron por penales.
El duelo en el estadio Green Point de Ciudad del Cabo tomó en la antesala un giro imprevisto cuando los alemanes, que rara vez entran en polémicas y mucho menos las empiezan, dijeron que los argentinos son desleales dentro de la cancha y además “provocadores”, como sostuvo el volante Bastian Schweinsteiger.
El técnico argentino Diego Maradona la paró de pecho. Y por ahora sin sacar su lengua filosa replicó diciendo que a los germanos los carcomían los nervios por la responsabilidad del partido.
“Dice (Schweinsteiger) que nosotros somos unos inadaptados. Pero quiero decirle que sepa que nosotros jugamos al fútbol y él lo va a ver en vivo y en directo en la cancha”, señaló Maradona el jueves al Canal 13 de Argentina.
“Estamos tensos, pero no nerviosos”, expresó el capitán de Alemania Philipp Lahm en esa guerra de palabras, en el preludio de que podría haber problemas a la menor pierna fuerte.
Y con Messi en la cancha, también habría talento.

MESSI VA CON TODO
Messi no se entrenó el jueves debido a un estado gripal que activó la alarma en Argentina, pero un día después el portavoz de la delegación, Andrés Ventura, dijo que el problema estaba superado.
Considerado el mejor jugador del mundo, la “Pulga” del Barcelona tendrá la oportunidad perfecta para tomarse revancha de todo: en el duelo del 2006 no sólo que Argentina fue eliminada por Alemania, sino que él salió entre los suplentes sin jugar un minuto.
Para este desquite, Messi tendrá en Maradona a un aliado de lujo: el ahora técnico cayó con Argentina 1-0 ante Alemania en la final de Italia 1990, sin poder repetir el éxito de México 1986 cuando se coronó campeón con un 3-2 de los Albicelestes sobre los teutones.
Este choque de gigantes _ Argentina ganó dos mundiales y Alemania tres_ los encuentra con un avasallante y por ahora insuperable poder de fuego.
La única duda de Maradona sería si mantiene a Nicolás Burdisso en el centro de la defensa, o lo devuelve al banco para devolverle la titularidad a Walter Samuel, recuperado de una lesión muscular lo dejó dos partidos inactivo.
En la otra vereda, Podolski y el volante Mesut Oezil se ausentaron el jueves de un entrenamiento y se espera para confirmar su condición.

UN CHOQUE OFENSIVO
Con cuatro partidos, Argentina está a la cabeza entre los equipos más goleadores con 10 tantos y Alemania es su escolta con nueve. Ambos tienen dos en contra.
Aunque teje maniobras exquisitas y es uno de los mejores jugadores del Mundial, Messi no sacudió la red.
Pero en gran parte gracias a él, su compañero de ataque Gonzalo Higuaín está subido al techo de los artilleros con cuatro tantos, dos más que Carlos Tévez, el otro punta que completa el trípode ofensivo.
Quizás con un juego no tan ofensivo, pero casi igual de efectivo, Alemania también tiene su punto fuerte en la ofensiva, donde Thomas Mueller cosechó tres goles y Lukas Podolski y Miroslav Klose dos cada uno.
Si Alemania deberá cuidarse en particular de Messi, quien ya sea en broma o en serio le prometió a Maradona que metería dos goles, otro tanto deberá hacer Argentina de Klose.
El insaciable Klose, con sus dos goles en Sudáfrica, sumó 12 tantos en los mundiales, los mismos que Pelé y solo superado por el brasileño Ronaldo (15), su compatriota Gerd Mueller (14) y el francés Just Fontaine (13).

QUÉ DICE LA HISTORIA
CIUDAD DEL CABO, SUDÁFRICA, AFP
Argentina y Alemania se enfrentaron en 18 ocasiones, con ocho victorias argentinas, cinco empates y cinco victorias germanas.
Ambas selecciones protagonizaron un total de cinco enfrentamientos en el marco de la cita planetaria, en la que germanos y argentinos se midieron en dos finales, con victoria de los primeros en Italia-1990 y de los segundos en México-1986.
De entre esos duelos en la cita planetaria, el más polémico fue el que tuvo lugar en los cuartos de final del Mundial-2006, donde Alemania, actuando como local, logró su billete para las semifinales en detrimento de los argentinos (1-1 tras prolongación, 4-2 en los penales).
Al término del partido, se desencadenó una batalla campal entre jugadores y miembros de ambas selecciones.