Un poderoso tifón azotó el lunes el norte de Filipinas, derribando el tendido eléctrico y causando fuertes lluvias. El meteoro causó la muerte de al menos una persona por un derrubio, mientras que 45 pescadores se reportan desaparecidos.
El tifón Utor, descrito como el más fuerte a escala global en lo que va del año, tocó tierra en la provincia montañosa oriental de Aurora con vientos sostenidos de 175 kph (109 mph) y ráfagas de hasta 210 kph (130 mph).
Imágenes de la televisora ABS-CBN mostraban a una mujer que era arrastrada por un río en la provincia vecina de Isabela. La mujer agita las manos para pedir ayuda mientras trata de asiste a escombros y es azotada por enormes olas lodosas. No se sabe hasta el momento que ocurrió con la mujer.
En la provincia de Benguet, un hombre de 22 años murió camino al hospital luego de que fue sacado de los escombros de un deslave que cayeron sobre un canal que estaba limpiando, dijo Andrew Alex Uy, de la defensa civil regional.
El tifón generó olas de hasta 2,5 metros (8 pies) de altura.
En la provincia norteña de Pangasinan, 25 pescadores a bordo de tres botes no regresaron a sus hogares, dijo el portavoz de la policía provincial Ryan Manongdo.
Otros 20 de las provincias orientales de Catanduanes y Camarines Norte también se reportaron extraviados.
Las autoridades guardan esperanzas de que simplemente se estén refugiando en islas vecinas.
Hacia la tarde del lunes, el tifón había cruzado la isla norteña de Luzón y avanzaba rumbo a China con vientos de 140 kph y ráfagas de 170 kph, dijo el meteorólogo del gobierno Jun Galang.
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