Estados Unidos dijo el viernes que la visita de la mandataria brasileña Dilma Rousseff a la Casa Blanca es una demostración de que la relación bilateral es saludable.
La subsecretaria de Estado para América Latina Roberta Jacobson consideró un problema que la opinión pública no perciba estabilidad en la relación aun cuando la cooperación ha aumentado los últimos meses en varias áreas.
La relación bilateral sufrió un importante traspié cuando Rousseff desatendió una invitación de Barack Obama a la Casa Blanca en octubre de 2013 en protesta por los documentos filtrados por el ex contratista de la Agencia de Seguridad Nacional, Edward Snowden, que revelaron supuestas actividades de espionaje estadounidense a los gobiernos de México, Colombia y Brasil.
Durante una conferencia en el Atlantic Council, el encargado de negocios de la embajada brasileña Benoni Belli dijo que Rousseff vendrá este mes a Washington porque quiere visitar Estados Unidos lo antes posible pero su agenda no le permite una visita de Estado este año.
"Pero vemos esta visita como especial, no como una visita de trabajo cualquiera. Una visita especial con bastantes elementos", indicó. "Cuando ella venga, verán señales y gestos de que esta visita es muy importante", dijo Belli.
Jacobson indicó que la agenda de la reunión bilateral prevista para el 30 de junio incluirá temas diversos como educación, ciencia, tecnología, cambio climático, defensa y temas regionales como la crisis política venezolana y las elecciones venideras en Haití.
Jacobson agregó que "no creo que haya una cantidad de acuerdos bilaterales" necesarios para medir el éxito de la reunión sino "la diversidad de la agenda temática".
La subsecretaria sostuvo que ambos mandatarios abordarán maneras de potenciar la influencia de Brasil como vecino y miembro de Unasur para obtener la liberación de presos políticos y la celebración de elecciones legislativas este año en Venezuela.
Ambos funcionarios coincidieron en que los dos líderes también abordarán la necesidad de lograr acuerdos sobre cambio climático antes de la cumbre global prevista a fin de año en París.
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